Las 10 Mejores Canciones de The Animals
Por Paul Rigg
La banda inglesa de R&B The Animals tuvo al menos dos grandes encarnaciones, con la versión inicial -que incluía a Eric Burdon, Alan Price, Chas Chandler, Hilton Valentine y John Steel-, que llegó a la fama en 1964 y formó parte de la "invasión británica" junto con los Beatles, los Kinks y los Rolling Stones. Tras una serie de éxitos, la banda se separó hacia 1966 y Burdon formó una nueva formación y se trasladó a California como Eric Burdon and the Animals. Esta última encarnación tenía un sonido más psicodélico y también tuvo éxito en las listas de éxitos. Desde entonces han tenido varios regresos y fueron incluidos en el Salón de la Fama del Rock and Roll en 1994. Para celebrar el cumpleaños de Burdon el 11 de mayo, Guitars Exchange selecciona las 10 mejores canciones de la legendaria banda.
10. Boom, Boom (1964)
Si piensas en The Animals como una banda tranquila, este tema pronto desafiará esa noción. Puede que los Rolling Stones también tuvieran fuertes raíces de blues, pero la energía de Burdon en el escenario (véase el vídeo que acompaña a este artículo) ayudó a que toda una nueva generación conociera el clásico de John Lee Hooker.
9. Monterey (1967)
Esta canción rinde homenaje al Monterey Pop Festival de 1967 y a muchas de las bandas que tocaron allí, como The Grateful Dead, Jimi Hendrix, y Hugh Masekela, a quienes se menciona en la letra. Burdon recordaba años después: "Era el primer concierto que dábamos con una nueva formación. Apenas habíamos podido ensayar, pero lo conseguimos. Tengo grandes recuerdos de haber estado allí. Fue un fin de semana maravilloso y nunca lo olvidaré".
8. When I Was Young (1967)
When I Was Young, coescrita por Burdon, muestra un lado diferente de The Animals y produjo otro éxito para la banda reformada. Recordando, entre otras cosas, las dificultades de vivir la Segunda Guerra Mundial, la canción presenta una maravillosa guitarra distorsionada. Posiblemente fue este último elemento el que animó a los Ramones, y a muchos grupos grunge menos conocidos, a versionarla posteriormente. "Cuando la escribí por primera vez, se la toqué a George Harrison y su comentario fue: '¡Genial! Tienes que hacer más de esto. Sabes que podrás cantar esta canción cuando tengas cuarenta años'", explicó Burdon. "¡Ahora tengo 70 años y sigo cantándola!".
7. Don't Bring Me Down (1966)
Co-escrita por el legendario equipo compositivo formado por Carole King y Gerry Goffin, esta maravilla de 1966 contó con Barry Jenkins en la batería, una gran contribución de órgano y Burdon demostrando su increíble talento como vocalista principal.
6. Inside Looking Out (1966)
Esta canción folk tradicional recibió un giro diferente por parte de The Animals, que empezaban a abrazar los sonidos más psicodélicos que iban a ser dominantes hacia el final de la década. Como comentó Burdon: "Es el primer número que grabamos sin melodía. Tiene su origen en una canción de la prisión de Mississippi; el tipo de blues que siempre hemos querido hacer".
5. Riverside Country (1977)
Publicado en el disco de regreso de The Animals, Before We Were So Rudely Interrupted, este corte menos conocido es uno de los mejores del grupo. Compuesta por la formación original de la banda, la canción rezuma sensualidad, con Burdon acariciando la letra: "Oh baby, stroll with me down by the riverside [...] Oh baby, the sun is warm, your eyes they shine, No matter where I go you'll always be resting on my mind".
4. It’s My Life (1965)
La letra de It's My Life está llena de bravuconería, e incluso de desagrado, lo que posiblemente sea una de las razones por las que Burdon no disfrutaba cantándola. El protagonista busca una mujer para "vivir de su dinero", diciendo: "Es mi vida y haré lo que quiera". Escrita por Roger Atkins y Carl D'Errico, este último explicó que : "'It's My Life" surgió cuando Mickie Most, el productor de The Animals, dijo que buscaba canciones para el grupo. Los guionistas se pusieron a escribir [pero] 'It's My Life' [...] no tenía suficiente garra y no tenía el ritmo adecuado, así que la reescribí. Después de la reescritura todo el mundo sabía que era un éxito".
3. Don't Let Me Be Misunderstood (1965)
Originalmente publicada por Nina Simone, The Animals subió el ritmo y la convirtió en un éxito tanto en el Reino Unido como en Estados Unidos. Con la Rickenbacker de 12 cuerdas de Valentine y el órgano celestial de Price, la letra tocó una fibra sensible, y Burdon dijo más tarde: "He sido realmente incomprendido. Por mi madre, mi padre, los profesores del colegio, un par de mujeres con las que me casé. He sido incomprendido toda mi vida". Esta balada "nunca fue considerada material pop", observó, "pero de alguna manera nos la pasaron y nos enamoramos de ella inmediatamente."
2. We Gotta Get Out of This Place (1965)
La pareja de compositores Cynthia Weil y Barry Mann aceptaron el reto de Mickie Most de "hacer que la banda sonara más americana", escribiendo esta canción que captura el sentimiento de rebelión juvenil. En cierto modo, el sonido recuerda a los trabajos de The Who, ya que Burdon da rienda suelta a su ira en su interpretación. Tal vez recordaba las frustraciones de crecer en el arenoso Newcastle industrial, pero también resonaba con los jóvenes estadounidenses que luchaban en Vietnam. Respecto a la rabia, Burdon comentó más tarde: "Siempre me he visto como un punk. The Animals podría haber evolucionado de esa manera. Teníamos la energía y la rabia".
1. The House of the Rising Sun (1964)
Probablemente, generaciones de propietarios de tiendas de guitarras se han vuelto locos por las terribles versiones del riff de guitarra que abre esta canción, pero la versión de The Animals capta tu atención y nunca la abandona. Esta canción tradicional hacía referencia originalmente a un burdel de Nueva Orleans -se llamaba así por su ocupante Madame Marianne LeSoleil Levant (que significa "Sol Naciente" en francés)-, pero la banda convirtió al protagonista en un jugador para que tuviera más posibilidades de ser reproducida en la radio. Llegó al número 1 en el Reino Unido el 9 de julio de 1964 y en América dos meses después. Como dijo Burdon: "Es una canción que estaba predestinada. Estaba hecha para mí". Al igual que el tema Ace of Spades de Motörhead, tiene la extraña capacidad de hacerte parecer malo con sólo escucharlo...