Definiendo el art rock
Por Sergio Ariza
La guitarra de Phil Manzanera sirvió para definir el sonido del art rock en su
tiempo en la Roxy Music, su original
sonido y sus innovadores solos le dieron mayor angularidad y musicalidad a una
banda adelantada a su tiempo que mezclaba arte, moda o cine con música de
vanguardia y rock & roll de los 50. Su inquietud también le llevó a
innovadores proyectos junto a Brian Eno
y su habilidad con las seis cuerdas le ha llevado a tocar con mitos como Bob Dylan o David Gilmour.
Manzanera nació un 31 de enero de 1951 en
Londres bajo el nombre completo de Philip
Geoffrey Targett-Adams. Su padre era inglés y su madre colombiana, lo que
le llevó a vivir la mayor parte de su juventud en lugares de Sudamérica y Cuba.
Fue precisamente en esa isla donde se hizo con su primera guitarra, una
española, a los seis años de edad. Las primeras canciones que aprendió eran
propias del folklore cubano y estaban inspiradas en la Revolución cubana, hecho
que ocurrió mientras él vivía allí. Pero fue en Venezuela, a los 9 años de
edad, donde se enamoró del rock & roll, gracias a gente como Buddy Holly y Elvis
Presley, lo que le llevó a pedirle a sus padres que le llevaran a la
escuela a Inglaterra. Allí viviría la explosión de la escena británica con
grupos como los Beatles y los Stones. Con su primera eléctrica en los
brazos, una Hofner Galaxie roja, decidió que quería formar una banda.
Para cuando terminó el instituto decidió que
no quería ir a la universidad sino dedicarse por completo a la música. Su madre
estaba preocupada por su futuro pero su hermano mayor la tranquilizó, "conozco a alguien que es músico profesional
y le puede dar varios consejos a Phil". Se trataba de David Gilmour
que acababa de entrar en Pink Floyd
y estaba grabando su primer disco con ellos, A
Saucerful of Secrets. Fue el inicio de una amistad que duraría años.
Ninguno de los dos recuerda lo que se dijo esa tarde pero, como recuerda el
propio Gilmour, "debí darle algún
consejo fantástico porque cinco años después estaba en la Roxy Music".
El caso es que Gilmour no era la única
estrella del rock que conocía y es que, gracias a los hermanos MacCormick, Robert Wyatt también estaba en su lista de amistades. Gracias al de
Soft Machine su grupo, Pooh and the Ostrich Feather, consiguió
sus primeros bolos. Con el tiempo se cambiarían el nombre a Quiet Sun y pasarían a formar parte de
la escena progresiva de Canterbury junto a bandas como los propios Soft
Machine, Caravan o Gong. La banda se metía en complejos
pasajes instrumentales, cercanos al jazz-rock, con complicados tempos y mucho
espacio para la improvisación en su flamante Gibson ES-335 roja, una guitarra
que se compró en 1970.
Pero Quiet Sun llegó a su fin cuando su amigo Bill MacCormick dejó el grupo para
enrolarse en Matching Mole, la nueva
banda de Wyatt. Manzanera necesitaba una banda y la oportunidad se le presentó
cuando vio un anuncio en el Melody Maker
que decía "se busca al guitarrista
perfecto para banda de vanguardia". Había también una serie de
adjetivos que se requerían: "Original,
creativo, adaptable, melódico, rápido, lento, elegante, ingenioso, aterrador,
estable, complicado. Sólo músicos de calidad". Manzanera había oído
hablar de ellos y había escuchado una demo suya y se sintió totalmente
intrigado.
Se presentó en la prueba con su 335 y un cruel
catarro, allí estaban el cantante Bryan
Ferry, el mago de los sonidos Brian
Eno, el saxofonista Andy MacKay,
el batería Paul Thompson y el
bajista original de la banda Graham
Simpson. Le dijeron "hagamos una
jam" y comenzaron a tocar una canción de Carole King con solo dos acordes. Manzanera no se lo podía creer,
acostumbrado a los complicados tempos de Quiet Sun aquello fue como un soplo de
aire fresco, allí había completa libertad para desarrollar su creatividad. La
prueba le salió bien, pero entre los más de 20 candidatos que fueron elegidos
también estaba David O'List,
guitarrista de The Nice, y fue este
el que terminó haciéndose con el puesto.
A pesar de todo, había causado buena impresión
y le ofrecieron un puesto como 'roadie', sin ninguna otra alternativa,
Manzanera accedió. Fue así como comenzó a enamorarse del todo de la banda. Sin
que ellos lo supieran se aprendió su repertorio a la guitarra con lo que lo
tuvo fácil cuando un día, tras varios roces con otros miembros de la banda,
O'List no se presentó a un ensayo. Manzanera dio un paso al frente y la química
se hizo evidente desde el primer momento. Era el 3 de febrero de 1972, una
semana más tarde la banda firmaba su primer contrato discográfico y en menos de
un mes estaban grabando su primer disco.
La Roxy era un grupo de art rock y la imagen
era fundamental, una de las primeras cosas que le dijeron fue que tenía que
cambiar de guitarra y hacerse con una Stratocaster blanca. Manzanera lo hizo
pero también tocaría la 335 en el primer disco de la banda, un disco que supuso
una pequeña revolución y que salió al mercado el mismo día que The
Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders from Mars de David Bowie. El Glam se volvía arte
y los sonidos de los 50 se mezclaban con los experimentos electrónicos de Eno.
Es más la mayor parte de los instrumentos de la banda, el teclado de Ferry, el
oboe de McKay y la guitarra de Manzanera se pasaban por el sintetizador VCS3 de
Eno.
El resultado era un sonido único junto a unas
canciones tan irresistibles como Re-Make/Re-Model,
Ladytron o Virginia Plain,
escritas por Ferry. Esta última fue la que les valió el salto a la fama, cuando
entró en el Top Ten británico, lo que les llevó a aparecer en el conocido Top Of The Pops. El solo de la canción
fue una improvisación total de Manzanera en el estudio, basado en influencias
como la Velvet Underground.
Manzanera ya estaba totalmente integrado en la
banda a pesar de sr más joven que el resto de la banda y no haber pasado por la
universidad y la escuela de arte como todos ellos. Su imagen se había
sintetizado con la glamourosa
presentación de la banda pero todavía faltaba la guinda.
Después de que le
robaran la 335 un anuncio del Melody Maker le dio una idea. Se vendía una
Gibson roja que se llamaba Firebird VII y era de 1964. Manzanera no tenía ni
idea de esa guitarra pero quedó fascinado por su forma y sintió un flechazo.
Pagó las 150 libras y aquel instrumento se convirtió en el más importante de su
carrera.
Y es que la Firebird no pudo tener un mejor
debut. El segundo disco de la banda, For
Your Pleasure, fue el mejor de su carrera. Desde los momentos más movidos
con Do The Strand y Editions Of You, hasta la escalofriante
quietud de In Every Dream Home A
Heartache, pasando por la extraña Bogus
Man, que podría haber aparecido en algún disco de Can, o Beauty Queen y Grey Lagoons en las que dan rienda
suelta a su particular amor por la música de los 50, For Your Pleasure confirmaba que la Roxy era la banda más original
dentro del Glam, la que tenía una personalidad más propia, con cada miembro
aportando cosas, como los futuristas sintetizadores de Eno, las formas de
'crooner' moderno de Ferry y los originales solos de McKay al saxo y Manzanera
a la guitarra.
Este último tuvo su particular momento de gloria con el
increíble solo final de In Every Dream
Home A Heartache, probablemente el mejor de su carrera. El instrumento con
el que lo hizo aparecía en la portada interior, era la Firebird, junto a ella y
Manzanera aparecían el resto de la banda portando también extraños modelos como
una Hagstrom Swede, o una Weissenborn de slide.
Pero tras la gira, Ferry y Eno, las dos caras
visibles de la banda, chocaron sobre la dirección de la misma y el segundo
abandonó la nave. A pesar de todo, Manzanera siguió siendo amigo de ambos y se
vio en una difícil situación, compaginar a ambos. El mes de septiembre de 1973
fue uno de los más atareados en la carrera de Manzanera. De 12 de la noche a 6
de la mañana trabajaba en el disco de debut de Eno, Here Come the Warm Jets, luego cogía el metro y se iba a la otra
punta de Londres a grabar el tercer disco de la Roxy, Stranded, sin decir una sola palabra a Ferry sobre su doble vida.
Pero el resultado valió la pena y le sirvió para estrenarse como compositor con
ambos, en el disco de la Roxy compuso la música de Amazona, donde además se luce con la guitarra, mientras que con Eno
compuso las maravillosas Needles in the
Camel's Eye y Cindy Tells Me.
La salida de Eno hizo que la banda fuera
derivando hacia una sofisticación mayor pero no les restó un ápice de popularidad.
Manzanera y MacKay comenzaron a aportar más, el primero fue coautor de otra de
las grandes canciones de la banda, Prairie
Rose, y MacKay de Love Is The Drug.
Aun así Ferry comenzó a compaginar su carrera en solitario con la de la banda y
MacKay pronto hizo lo mismo. Así que en 1975 Manzanera comenzó a grabar su
primer disco en solitario, Diamond Head.
En el disco colaboraban amigos como Eno, Robert Wyatt, John Wetton, sus compañeros de la Roxy Paul Thompson y Andy MacKay,
además de los hermanos MacCormick, con los que decidió grabar un disco como
Quiet Sun, llamado Mainstream. Luego
volvió con Roxy pero tras la gira de Siren,
en 1976, la banda se separó.
Manzanera aprovechó el tiempo para volver a
juntarse con Eno y sacar el influyente 801
Live, disco que recibió los elogios de gente como Robert Fripp o Gilmour, además de
sacar su segundo disco en solitario, K-Scope,
cuya canción titular sería ‘sampleada’ por Jay-Z
y Kanye West en el exitoso Watch The Throne. Pero la llegada del
punk y la Nueva Ola volvió a poner de moda a la Roxy, y Ferry, Manzanera,
Mackay y Thompson volvieron a juntarse. El disco más destacado de esta segunda
etapa fue Avalon, donde se veía su
sonido más sofisticado y refinado en clásicos como More Than This y la canción titular.
Pero tras el éxito volvieron a separarse en
1983. En 1987 comenzó una estrecha colaboración con Gilmour, coescribiendo una
canción, One Slip, para el A Momentary Lapse of Reason de Pink
Floyd. En los 90 tocó con Bob Dylan y produjo a grupos como Héroes del Silencio o Os Paralamas do Sucesso, lo que le
convirtió en uno de los principales productores del mercado latino.
En 2001 la Roxy se volvió a reunir para una
gira mundial y Manzanera desempolvó la Firebird, además de diversas Les Paul,
que también utilizaría en su gira junto a Gilmour en 2006. Produciría sus
discos en solitario, On An Island y Rattle That Lock, y el último de Pink
Floyd, The Endless River.
Parece claro que su madre no tenía muchas
razones para preocuparse, Phil Manzanera supo cuidarse a la perfección. No
sabemos lo que le dijo Gilmour en una tarde de invierno de 1967, pero Phil
Manzanera no solo se convirtió en músico profesional sino que logró ser uno de
los elegidos que deja huella.