El capitán de los Heartbreakers
Por Sergio Ariza
Es imposible desligar la vida y la obra de Mike Campbell de la de Tom Petty, así que comencemos por
el momento en el que se conocieron. Era 1970 y Petty estaba formando una nueva
banda junto a su amigo de la infancia Tom
Leadon. Iban a hacerle una prueba a un batería en su casa y cuando llegaron
allí le comentaron a este que también querían incorporar a otro guitarrista. El
batería, que se llamaba Randall Marsh, les dijo que su compañero de habitación
tocaba la guitarra, así que le llamó y de la puerta de al lado apareció Mike
Campbell con una cochambrosa Guyatone japonesa de 60 dólares. Petty no se lo
podía creer y comenzó a reírse por no llorar. Pero, a pesar de todo, Campbell
enchufó su guitarra y cuando le preguntaron qué quería tocar respondió "Johnny B. Goode". Tres minutos
después las risas se habían tornado en una frase para la historia "tío, no sé quién eres pero vas a estar en mi
banda para siempre". Cuando 47 años después de aquello Tom Petty
murió, había cumplido su palabra al pie de la letra y Mike Campbell y sus
guitarras le acompañaron hasta el final.
Es imposible desligar su sonido de la obra de
Petty a la que contribuyó no solo como guitarrista sino componiendo junto al
cantante algunas de sus canciones más conocidas como Refugee, Here Comes My Girl, You Got Lucky, Runnin' Down a Dream, You
Wreck Me o Stop Draggin' My Heart
Around, además de producir varios de sus discos. Su estilo como guitarrista
siempre se ha basado en servir a la canción, dando pequeños toques melódicos
que coloreen la misma sin llamar la atención sobre sí mismo. Siempre ha puesto
por encima la canción sobre el virtuosismo pero eso no quiere decir que Campbell
no tenga una voz propia a la guitarra. Es algo que ha cogido de algunos de los
guitarristas que más le han influido como George Harrison o Roger McGuinn. Con su modestia habitual
Campbell lo explica así, "no creo
que se pueda mejorar a Jimi Hendrix o Eric Clapton en cuanto a guitarra solista
se refiere. Me gusta que mi forma de tocar realce las canciones".
Cualquier fan de Petty y los Heartbreakers te podrá decir que cumplió a la
perfección con eso.
Campbell nació en Panama City, Florida, el 1
de febrero de 1950, su padre era un gran fan de Elvis y eso hizo de Scotty Moore su primer ídolo a las
seis cuerdas pero, como la mayoría de su generación, fueron los Beatles y Dylan los que le convencieron de formar una banda. Tras escuchar Like A Rolling Stone Campbell les pidió
a sus padres una guitarra, su madre le compró una Harmony acústica a la que era
imposible sacar un acorde por lo dura que estaban sus cuerdas. Mike pensó que
no estaba destinado para tocar la guitarra hasta que en casa de un amigo cogió
una SG y se dio cuenta de que no hacía falta sangrar para poder tocar. Fue
entonces cuando su padre le compró la Guyatone con la que hizo la audición para
Petty. No era una gran guitarra pero le dio el puesto que le cambiaría la vida.
Tras entrar en Mudcrutch (que así se
llamaba la banda) Petty le dijo "tenemos
que conseguirte una buena guitarra". Y así fue, la primera (de los
centenares que llegarían con el tiempo) fue una Gibson Firebird VII. Es la que
utilizaba en los primeros tiempos de Mudcrutch, cuando tocaban junto a Lynyrd Skynyrd por Gainesville,
Jacksonville y demás ciudades de Florida.
Pero el éxito tardó mucho en llegar, Petty y
Campbell vieron como los de Ronnie Van
Zandt lo lograban, vieron cómo se marchaban varios miembros y aparecían
otros, entre ellos otro personaje fundamental en su historia, el teclista Benmont Tench, pero tuvieron que
esperar hasta 1974 para que un sello se interesara por ellos. Se marcharon a
California y grabaron para Shelter un único single, Depot Street, que no tuvo ninguna repercusión comercial tras su
publicación en 1975, lo que provocó la desbandada de Mudcrutch. Pero la
compañía tenía fe en Petty como compositor así que le ofreció un contrato en
solitario. Petty aceptó inmediatamente pero, fiel a su palabra, se quedó con
Campbell. Poco después Tench comenzaba a ensayar con Ron Blair al bajo y Stan
Lynch a la batería, Campbell y Petty se acercaron a un ensayo y decidieron
enchufar sus guitarras, en ese momento Campbell utilizaba una Stratocaster
sunburst del 64 que aparece en la mayoría de los discos de su carrera. Tom
Petty & The Heartbreakers acababan de nacer, con el tiempo les llamarían
"la banda de rock and roll más
auténtica de América".
Así comenzaron a grabar su primer disco
durante cuyas grabaciones Campbell se hizo con su guitarra favorita una Fender
Broadcaster con la que pondría la guinda a canciones como American Girl, Breakdown o Anything
That's Rock 'n' Roll. Fue también la guitarra con la que compuso su primera
canción junto a Petty, Rockin' Around (With
You), la encargada de abrir el disco. En este trabajo ya se puede apreciar
el estilo de Campbell, como en el magnífico vibrato de Breakdown, influido por Mike Bloomfield, o el icónico riff de American Girl, puede que la mejor
canción de su carrera, grabada un 4 de julio de 1976, una coincidencia que la
hace todavía más "americana".
Pero quizás el mayor elogio para dos fans de los Byrds como ellos fuera que Roger
McGuinn la versionara al año de publicarse. Además se cuenta que cuando escuchó
la canción le preguntó a su mánager: "¿Cuando
he escrito esa canción?".
Y es que si hay un grupo que se puede tomar
como principal referencia a la hora de escuchar a los Heartbreakers es los
Byrds. Algo que se puede apreciar perfectamente en uno de los dos singles de
éxito de su siguiente trabajo, Listen To
Her Heart. Pero para alcanzar ese sonido a Campbell le faltaba todavía
algo, una Rickenbacker de 12 cuerdas. Así que cuando vio un anuncio en el que
ofrecían una por 200 dólares, se puso al volante y se presentó allí al
instante. Cuando la vio se quedó decepcionado era una 625 y no la 360 de sus
adorados Harrison y McGuinn. Pero ya que había ido le ofreció al tipo 150
dólares y se la llevó. Sería con esa guitarra con la que compondría, y tocaría,
Here Comes My Girl en el disco que
les convertiría en estrellas, Damn The
Torpedoes. Es la misma con la que aparece Petty en la portada y la que ahora
mismo se expone en el Museo del Rock and Roll de Cleveland. Como diría más
tarde “sin lugar a dudas los 150 dólares
mejor gastados de mi vida”. También sacó a relucir su Les Paul Goldtop para
componer otro de sus clásicos, Refugee,
aunque a la hora de grabarla se decantó por una Telecaster a través de un
Marshall.
Las guitarras, y los discos, seguirían
llegando haciendo de Tom Petty y los Heartbreakers una de las bandas de rock
más importantes de los 80. Campbell siguió siendo la mano derecha de Petty
hasta en su debut en solitario, con Full
Moon Fever, en el que se encuentra otra de sus colaboraciones, Runnin’ Down A Dream, construida sobre
uno de sus mejores riffs y que contiene el que posiblemente sea su solo más
celebrado, uno en el que, por una vez, se permite vestirse el traje de ‘guitar
hero’. Pero esa década también le vio colaborar con más gente como Stevie Nicks, Stop Draggin’ Around también lleva su firma, o Don Henley, para el que escribió la música de uno de los mayores
éxitos de la década, The Boys Of Summer,
además de tocar la guitarra en la misma.
Pero, posiblemente, la colaboración que más
ilusión le hizo llegó cuando Bob Dylan le pidió tocar en uno de sus discos, en
concreto Empire Burlesque de 1985, en
el que Campbell aparece en varias canciones como la notable Seeing The Real You At Last. El bardo de
Minnesota se quedó encantado con Campbell y Tom Petty y los Heartbreakers se
convirtieron en 1986 en su banda de acompañamiento durante su gira de aquel
año. Mike Campbell nunca había olvidado la primera vez que escuchó Like A Rolling Stone con 15 años en
Florida. Esos sentimientos se le presentaron en el primer concierto de la gira
cuando se vio tocando la canción que cambió su vida con el hombre que la había
escrito. La conexión Dylan no acabó allí y de la colaboración entre el Nobel,
Petty y un riff de Campbell surgió Jammin’
Me una de sus mejores canciones. Campbell volvería a aparecer en varios
discos más de Dylan, en los que su estilo económico, en el que no se malgasta
ni una sola nota, le va como anillo al dedo, y Petty acabaría formando los Travelling Wilburys junto a él, George
Harrison, Roy Orbison y Jeff Lynne.
Los 90 trajeron otra colaboración de ensueño
para Campbell cuando apareció en el disco de regreso de su adorado Roger
McGuinn, tras 10 años sin publicar nada. Dentro de su historia con Petty el
disco más destacado fue Wildflowers,
el segundo solitario del cantante, en el que Campbell ejerció como productor,
junto al propio Petty y Rick Rubin,
además de componer la rockera You Wreck
Me, en la que vuelve a dejar patente su amor por Chuck Berry, y volver a dejar
huella con su guitarra a lo largo de todo el disco. También se permitió el lujo
de sacar un disco de surf instrumental, una de sus pasiones ocultas, con un
grupo llamado The Blue Stingrays que
le volvía a reunir con Randall Marsh, el batería gracias al cual consiguió el
puesto de su vida.
El Siglo XXI sirvió para consolidar a Tom
Petty y los Heartbreakers como una de las bandas más referenciadas de EEUU. En
2006, para celebrar sus 30 años, Campbell recibió el honor de una guitarra
‘signature’ por parte del lutier alemán Duesenberg,
se trataba de la Duesenberg Starplayer TV, una guitarra que se tornó en mítica
cuando Campbell la utilizó en la actuación de la banda en la Super Bowl de 2008
delante de cientos de millones de televidentes. Un año antes Petty y Campbell
habían reformado Mudcrutch y llegaron a sacar dos discos con ellos.
En 2017 las celebraciones del 40 aniversario de
los Heartbreakers se alargaron con un concierto en el Hyde Park londinense para
60.000 personas. Abrieron con Rockin’
Around (With You), la primera canción que escribieron juntos Petty y
Campbell, la misma que abría su disco de debut. No se suponía que fuera a ser
un punto final pero la muerte de Petty en octubre de ese año hizo que así fuera.
Campbell pasó de ser el capitán de los
Rompecorazones a tener, sencillamente, el corazón roto. Poco antes le habían
preguntado cómo le gustaría ser recordado, con su humildad habitual dijo algo
así como que nunca había pensado en ello, pero que le gustaría ser recordado
como alguien que hizo feliz a la gente a través de la música. Que no se
preocupe entonces, millones de personas han sido felices escuchando su música y
la del amigo que, sin conocerle, le dijo que compartirían banda para siempre…