Recordando a John Lennon a través de sus guitarras más significativas
Por Sergio Ariza
Si 2020 no estuviera siendo suficientemente horrible por sí mismo, ahora nos trae dos recordatorios dolorosos, primero que este año, el 9 de octubre, John Lennon debería celebrar sus 80 años y, después, el próximo 8 de diciembre, nos recordará que no puede hacerlo porque hace 40 años un indeseable (de cuyo nombre no quiero acordarme) acabó con su vida a balazos. Desde Guitars Exchange queremos recordar al que probablemente sea, junto a su amigo/rival Paul McCartney, el compositor de canciones más importante del Siglo XX. Para ello queremos hacerlo de una manera atractiva para nuestros lectores, a través de sus principales guitarras.
Gallotone Champion
Empezamos uno de los días más señalados del Siglo XX, el día en el que John Lennon conoció a Paul McCartney. Lennon se subía a un escenario al frente de sus Quarrymen, una banda de skiffle, con su tupé, su camisa de cuadros y su primera guitarra, una Gallotrone Champion. Todavía no había cumplido los 17 años. Entre el público que fue a verle se encontraba un chaval que acababa de cumplir 15 años un mes antes y había ido invitado por un amigo común. Era McCartney que no dudó en llevarse su guitarra, una Framus Zenith, y tras la actuación dejó anonadado a Lennon cuando le tocó al completo el Twenty Flight Rock de Eddie Cochran. En menos de una semana Lennon le invitaría a unirse a su banda y el futuro de la música popular se sellaría, igual que el día que Robert Johnson le vendió su alma al Diablo en un cruce de caminos y Elvis Presley pasó por Sun Records para grabarle un disco a su madre.
Fue Julia, su madre, la que le introdujo en la música, introduciéndole a Elvis Presley, su gran ídolo y enseñándole a tocar el banjo, un instrumento en el que le enseñó a tocar el Ain't That A Shame de Fats Domino. No está muy claro si fue ella o su tía Mimi, la hermana de Julia y la mujer que le crió realmente, quien le compró esta primera guitarra por 10 libras, lo que está claro es que fue un negocio redondo.
Hofner Club 40 de 1959
A pesar de no vivir con ella, su madre Julia era una de las figuras fundamentales de su vida, así que es normal que su muerte en julio de 1958, atropellada por un coche, tuviera un enorme impacto en su vida. John se volvió todavía más conflictivo, bebiendo mucho y metiéndose en peleas constantes, también hizo que su unión con Paul se estrechara mucho más, ya que McCartney también había perdido a su madre. Así que no es de extrañar que la primera guitarra eléctrica que tuviera llegara por métodos pocos lícitos. Cuando su banda había cambiado el nombre a Johnny And the Moondogs, y ya tenía a McCartney, abandonando el skiffle por el rock & roll, un 24 de noviembre de 1958 Lennon robó una Dallas Tuxedo tras una actuación. Pero la primera eléctrica de verdad llegaría en agosto de 1959 por unas 30 libras, era una Club 40 Hofner y fue su tía Mimi la que le puso más de la mitad del dinero, a pesar de que le volvió a dar uno de los consejos menos acertados, sobre todo leído hoy en día, de la historia: "La guitarra está muy bien, John, pero nunca te ganarás la vida con ella".
Rickenbacker 325 de 1958
Atención, estamos hablando del Santo Grial de las guitarras de los Beatles. En 1960 la banda había pasado a llamarse así y a estar compuesta por Lennon, McCartney, George Harrison (que entró a sugerencia de Paul y convenció a John, a pesar de su edad, tras tocar Raunchy en un autobús) y Stuart Sutcliffe, un amigo de la escuela de arte de John. En agosto de ese año les ficharon desde un club de Hamburgo y, sin batería, decidieron coger apresuradamente a Pete Best antes de embarcarse. Fue allí, en Alemania, donde Lennon se compró su Rickenbacker 325, una guitarra que había visto en un disco de Jean Thielemans. Harrison no sabe cómo pudo permitírsela o si llegó a pagarla entera pero la guitarra pasó a formar parte de la historia de los Beatles. Astrid Kirchherr la inmortalizó por primera vez en otoño del 60, pero no sería la última vez que el mundo la vería. La guitarra era anaranjada pero Lennon decidió pintarla de negro justo cuando los Beatles lograban su primer contrato. Sería con ella con la que Lennon grabaría Please Please Me, la canción con la que George Martin les dijo: "Acabáis de grabar vuestro primer número uno". No se equivocaba aquella guitarra fue la responsable rítmica de la 'Beatlemanía', siendo la guitarra con la que Lennon grabó todos los primeros éxitos y en la que se puede ver el enorme sentido del ritmo de éste, como se puede apreciar en All My Loving. Fue también con esta guitarra con la que Lennon apareció en el histórico programa de Ed Sullivan en 1964, el programa que batió todos los récords de audiencia de la televisión estadounidense.
Algunas de las canciones en las que la utilizó: Please Please Me, From Me To You, She Loves You, I Saw Her Standing There, All My Loving, I Want To Hold Your Hand
Rickenbacker 325 de 1964
Lennon nunca fue especialmente bueno cuidando las guitarras y la Rickenbacker 325 dejó de funcionar en plena gira americana de 1964. Pero en ese momento la banda ya se había convertido en la sensación mundial y la marca le envió una nueva, de ese mismo año, a Florida, donde estaban a punto de aparecer, por segunda vez, en el show de Ed Sullivan. Esa sería la primera aparición de esta segunda Rickenbacker que le acompañaría en la grabación de A Hard Day's Night y llegaría hasta Rubber Soul y Revolver. Por las mismas fechas Lennon también se haría, al igual que George, con una 12 cuerdas del mismo modelo que utilizaría en canciones como Ticket To Ride. Los primeros discos de los Beatles están ligados al sonido Rickenbacker y serían los responsables de que Roger McGuinn se hiciera con una para sus Byrds.
Algunas de las canciones en las que la utilizó: A Hard Day's Night, If I Fell, Dizzy Miss Lizzy, Wait, Day Tripper, And Your Bird Can Sing
Gibson J-160E de 1962
Tras firmar con EMI en 1962 Brian Epstein les dio dinero para que se compraran un equipo más aceptable. Así que John y George se fueron a la tienda Rushworth’s Music House de Liverpool y se compraron dos Gibson J-160E similares. Las dos harían su primera aparición en el primer sencillo de la banda, la de George sonaba en la cara A, Love Me Do, y la de Lennon y nuevamente la de Harrison, sonaban en la cara B, PS I Love You. Se convertiría en la guitarra favorita de Lennon, algo que no es de extrañar si uno piensa que fue con esta canción con la que compuso, cara a cara con McCartney, las canciones que les catapultaron a la fama, véase Please Please Me, She Loves You o From Me To You (I Want To Hold Your Hand, la compusieron al piano en la casa de Paul). La guitarra es el sonido acústico de los primeros Beatles, sonando en And I Love Her o If I Fell, pero también en cosas tan salvajes como Twist & Shout. La guitarra fue robada tras un concierto y apareció años después en casa del afortunado John McCaw que la terminaría vendiendo por 2.400.000 dólares.
Algunas de las canciones en las que la utilizó: Twist & Shout, I Should Have Known Better, And I Love Her, Can´t Buy Me Love, A Hard Day's Night, Things We Said Today
Gibson J-160E de 1964
La segunda de las J-160E es la guitarra que más veces ha utilizado John Lennon, siendo, posiblemente, la guitarra más importante de su guitarra. Esta es la que utilizó como instrumento principal, y por tanto para componer, desde los tiempos de Beatles For Sale hasta su muerte en 1980, suena en Help!, Nowhere Man, Girl, We Can Work It Out, A Day In The Life o Hey Jude, y es más que probable que fuera la guitarra con la que escribió Strawberry Fields Forever en Almería. También fue pintada con colores psicodélicos por The Fool en 1967, y se volvió a quedar en su color natural en 1968, en 1969 John pintó en ella unas caricaturas de él y Yoko, y fue la guitarra que tocó en Give Peace A Chance y sus 'encamadas' en contra de la Guerra de Vietnam. El sonido acústico de Lennon y los Beatles viene con esta guitarra, de la que era capaz de sacar grandes canciones como un mago conejos de una chistera.
Algunas de las canciones en las que la utilizó: Eight Days A Week, I Feel Fine, Help!, Norwegian Wood (This Bird Has Flown), Nowhere Man, Girl, We Can Work It Out, Yellow Submarine, I'm Only Sleeping, Lucy In The Sky With Diamonds, A Day In The Life, Julia, Dear Prudence, Hey Jude, Give Peace a Chance
Fender Stratocaster de 1961
Otra guitarra que se compró a la vez que George Harrison, puede que la de éste fuera mucho más conocida y utilizada, se trata de la fundamental Rocky, pero Lennon también utilizó su Strato, principalmente en el increíble Rubber Soul, donde se le puede escuchar, junto a Harrison, sacando petróleo de la guitarra enchufada a un Vox AC-100 Algunas de las canciones en las que la utilizó: Nowhere Man, In My Life, The Word, If I Needed Someone.
Epiphone ES-230TD Casino de 1965
Pero si hay una guitarra eléctrica que se pueda relacionar con Lennon es su Epiphone Casino, una guitarra que aparece en todos los discos de los Beatles desde Revolver hasta Abbey Road, pero también en los dos discos principales de su carrera en solitario, Plastic Ono Band e Imagine. Es también con la guitarra con la tocó el último concierto oficial de los Beatles (en Candlestick Park, San Francisco, en 1966), con la que apareció en la legendaria actuación de los Beatles en la azotea de Apple Corps y la que utilizó para su aparición en el Rock And Roll Circus de los Rolling Stones, interpretando Yer Blues. Es también la guitarra con la que ha grabado sus mejores momentos como guitarrista, desde la abrasadora intro de Revolution, al solo, compartido con McCartney y Harrison, en The End, sin olvidar su guitarra principal para Get Back o el sonido 'grungy' de Well, Well, Well... El equivalente eléctrico de la J-160.
Algunas de las canciones en las que la utilizó: Got To Get You Into My Life, Sgt. Pepper 's Lonely Hearts Club Band (reprise), Strawberry Fields Forever, Hey Bulldog, While My Guitar Gently Weeps, Happiness Is A Warm Gun, Yer Blues, Revolution, Come Together, The End, I've Got A Feeling, Get Back, Don't Let Me Down, How Do You Sleep?
Framus 5/024 Hootenanny de 1964
Pocas veces Lennon le fue infiel a la J-160 pero, cuando lo hizo, se decantó por una Framus 5/024 Hootenanny de 1964 que compró al año siguiente. Su aparición más mítica es en la película Help! donde se le puede ver tocando You've Got To Hide Your Love Away con ella, pero también aparecería al final de la carrera de la banda, cuando Lennon la rescató para usarla en la maravillosa Across The Universe e, incluso, en una de sus breves aportaciones a la segunda cara de Abbey Road, con Polythene Pam. Algunas de las canciones en las que la utilizó: You've Got To Hide Your Love Away, Polythene Pam, Across The Universe, The Ballad Of John And Yoko
Les Paul Junior de 1956
Otra de las guitarras más míticas de su carrera, gracias a su aparición en el famoso concierto del Madison Square Garden en 1972. Lennon se compró esta guitarra poco antes y la utilizó durante todo ese concierto, la única, y última, vez que Lennon dio un concierto por su cuenta tras la separación de los Beatles.