Ry Cooder como músico de sesión: Sus 10 mejores momentos
Por Sergio Ariza
Ry Cooder es uno de los mejores
guitarristas de slide de todos los tiempos. SU estilo único e inimitable hace
de él, posiblemente, uno de los cuatro pilares absolutos de este estilo junto a
Blind Willie Johnson (su máxima
inspiración), Elmore James y Duane Allman. Su trabajo está
ligado a la música de raíces, ya sea blues, folk, country, tex-mex o música
caribeña, con una importante obra en solitario pero también es uno de los más
importantes músicos de sesión de la historia. A continuación vamos a destacar
diez de estas colaboraciones, centrándonos en su faceta como músico de sesión,
evitando por tanto cuando es un tema propio, parte de una banda (Rising Sons o Captain Beefheart & His Magic Band) o responsable del proyecto,
como en las míticas sesiones de Buena
Vista Social Club.
The Rolling Stones/Marianne Faithfull - Sister Morphine
(1971, grabada en 1969)
Los Rolling
Stones habían seguido la pista de Cooder desde sus tiempos en los Rising
Sons, así que su nombre fue el primero de la lista cuando se vio que Brian Jones no iba a seguir con la
banda. Cooder fue llamado a Londres para trabajar en la banda sonora de
Performance, la película que supuso el debut de Mick Jagger como actor. Su increíble slide brilla con fuerza en Memo from Turner, la canción más
destacada del disco y nos enseña como habrían sonado unos Stones con Cooder de
guitarrista. Pero, como todo el mundo sabe, Cooder no fue el elegido para ser
un Rolling Stone y esto fue porque el americano terminó echando pestes de los
ingleses, diciendo que Keith Richards le había robado el
riff de Honky Tonk Women, entre otras
cosas. De sus sesiones con los Stones quedan pruebas como una larga 'jam' en la
que toca con Jagger, Bill Wyman y Charlie Watts, además de con el
pianista Nicky Hopkins, y que los
Stones sacarían al mercado en su sello en 1972 bajo el nombre de Jamming With Edwars. Mucho más
significativa es su aparición en dos de los discos clave de la banda, el Let It Bleed donde aporta la mandolina a
Love in Vain y la maravillosa 'slide'
que pone al Sister Morphine que
apareció en Sticky Fingers. Antes ya
había participado en la grabación original de la misma con la autora de la
letra, Marianne Faithfull, en una
versión en la que, además de Cooder, están Jagger a la acústica, Charlie Watts
a la batería y Jack Nitzsche al
piano. Su parte 'bottleneck', capaz de erizar la piel, está grabada, con casi
total seguridad, con su mítica Fender Stratocaster Daphne Blue del 67, a la que
realizó múltiples modificaciones.
Crazy Horse - I Don't Want to Talk About It (1971)
Danny
Whitten, Billy Talbot y Ralph Molina llevaban tocando juntos desde 1963, en 1968 formaban
parte de una banda llamada The Rockets
cuando Neil Young decidió ficharles como
su banda de acompañamiento y renombrarles como Crazy Horse, tras acompañarle en Everybody Knows This Is Nowhere y parte de After The Gold Rush, el trío decidió volver a probar fortuna por su
cuenta, pero esta vez iban a estar acompañados por varios músicos relacionados
con el canadiense, el pianista y arreglista Jack Nitzsche, el joven prodigio de
la guitarra Nils Lofgren y, nada más y nada
menos que Ry Cooder, que pone su sello en el slide en tres de las canciones de
este espléndido disco, Dirty Dirty, Crow
Jane Lady y I Don't Want to Talk
About It. En las dos primeras aparece de forma eléctrica, mientras que en
la tercera, la mejor del lote, su distintivo slide es acústico. Se trata de una
de las mejores canciones de la corta carrera de Whitten, con este y Lofgren a
las acústicas (este último casi seguro con la Martin D-18 que le regaló Young),
y Cooder subrayando la tristeza del cantante con las notas de su slide.
Little Feat - Willin´ (1971)
En diciembre de 1970 Ry Cooder publicó su
disco de debut, en él aparecían acompañándole Richie Hayward y Roy Estrada,
la sección rítmica de Little Feat,
un grupo formado por el guitarrista Lowell
George que acababa de abandonar a los Mothers
Of Invention de Zappa después de escribir Willin'. Según se cuenta el creador de Hot Rats le echó de la banda por una de
estas razones, la canción era demasiado buena como para seguir de músico de
acompañamiento, hacía referencias a drogas cosa que no gustaba a Zappa o, mi
favorita (aunque la más improbable), George se marcó un solo de guitarra de 15
minutos con el amplificador apagado. El caso es que Little Feat se encontraba
grabando su disco de debut y la que se convertiría en su canción más recordada
cuando George, un gran guitarrista de slide por cuenta propia, se cortó la
mano. No hubo dudas sobre a quién llamar para sustituirle, y así fue como Ry
Cooder toca el slide en la versión original de esta mítica canción. Todo hay
que decir que, al final, George se acabaría sacando la espinita al volverla a
grabar en su siguiente disco, Sailin´
Shoes. Eso sí, ya que Cooder estaba por allí también tocó en el medley de
canciones de Howlin' Wolf, Forty-four Blues/How Many More Years.
Randy Newman - Last Night I Had a Dream (1972)
De entre todos los artistas para los que ha
tocado Ry Cooder su relación más provechosa ha sido con Randy Newman, desde que se juntaron por primera vez con Gone Dead Train, para la banda sonora de
Performance, la magia siempre ha
estado presente. Cooder brilla especialmente en el espléndido 12 Songs, en canciones como Mama Told Me Not to Come o Let’s Burn Down the Cornfield, sin
olvidarnos de su aparición en Back On My
Feet Again de Good Old Boys, o You Can Leave Your Hat On de Sail Away. Pero mi favorita es la
maravillosa Last Night I Had a Dream
de Sail Away donde su slide crea la
atmósfera apropiada para la letra de Newman con muy pocas notas, sirviendo como
perfecto ejemplo de eso de que “menos es
más”. Cuando Newman habla de que en su sueño se le apareció "un vampiro" y "un fantasma" estos se hacen
presentes en las amenazantes notas de Cooder.
The Everly Brothers - Green River (1973)
En 1973 los Everly Brothers estaban más que hartos de cantar, noche tras noche,
sus viejos éxitos de los 50 y principios de los 60 en Las Vegas. Seguían
sacando discos desde entonces pero a su audiencia no parecía importarle, aunque
siguieron sacando grandes temas durante la etapa de la Invasión Británica e,
incluso, siendo de los primeros en apuntarse, con un gran disco, al naciente
country rock. Stories We Could Tell
les ve expresando esa frustración, como en la explícita I'm Tired of Singing My Song in Las Vegas de Don Everly, junto a la crema de los músicos de sesión de Los
Ángeles. Sin duda, la aportación más interesante es la que realiza Cooder con
su característico slide en la notable Green
River, otro clásico oculto de su carrera.
Doobie Brothers - Rainy Day Crossroad Blues (1975)
En 1974 los Doobie Brothers se habían reforzado con la incorporación del ex de Steely Dan, Jeff "Skunk" Baxter, por si fuera poco cuando al año
siguiente grabaron su primer disco con este, Stampede, decidieron llamar a Ry Cooder para dar sabor con su slide
al lamento cowboy de Crossroad Rainy Day
Blues. Es un vehículo perfecto para que Cooder se luzca con su peculiar
estilo. Para los momentos acústicos Cooder suele utilizar una Gibson Roy Smeck
de mediados de los 30, aunque también tiene una Martin 000-18 de los 50 con la
que grabaría su canción más recordada, la que daba título a la banda sonora de Paris, Texas.
Van Morrison - Full Force Gale (1979)
En 1979 Van Morrison volvió a su mejor forma
con el espléndido Into The Music, lo
mejor que sacaba desde los tiempos de Tupelo
Honey. En una de sus canciones más destacadas, una especie de gospel en el
que Morrison se ve "elevado por el
Señor" ("lifted up by the Lord"), decidió contar con un
breve pero intenso solo a cargo de Cooder.
Eric Clapton - The Shape You're In (1983)
Money
and Cigarettes fue el primer disco de Eric Clapton tras su rehabilitación
del alcoholismo. Tom Dowd, el productor,
le recomendó que se deshiciera de su banda, menos del indispensable Albert Lee, y contratara a los mejores
músicos de sesión posibles. Así llegaron gente como Donald "Duck" Dunn, Roger Hawkins o nuestro protagonista que
pareció inyectar sangre nueva a 'Mano Lenta', y es que las dos canciones en las
que más preeminente es el slide de este, Everybody
Oughta Make a Change y The Shape
You're In, son lo mejor del disco. No sabemos si Clapton utilizó la
Stratocaster roja a la que vemos derritiéndose en la portada, pero lo que está
claro es que, por momentos, vuelve a aparecer el fuego perdido.
The Textones (Carla Olson) - Clean Cut Kid (1984)
Carla
Olson se hizo con una increíble nómina de admiradores
entre las estrellas de rock con su banda The
Textones. Con el tiempo llegaría a grabar discos con gente como Gene Clark o Mick Taylor, además de trabajar
junto a Don Henley, Eric Clapton o John Fogerty. Entre sus seguidores
también estaba Bob Dylan que la
utilizó en el primer video que grabó, Sweetheart
Like You. Para devolverla el favor el bardo de Minnesota le cedió esta
canción, Clean Cut Kid, que le da la
oportunidad a Cooder, otro de los admiradores de Olson, de meter su slide en
una de las canciones más rockeras de su carrera.
John
Hiatt - Lipstick Sunset (1987)
En 1987 a John
Hiatt le pidieron que nombrara a su banda de ensueño, sin tener que
pensarlo mucho Hiatt contestó, Ry Cooder a la guitarra, Nick Lowe al bajo y Jim
Keltner a la batería. Como a veces los sueños se cumplen, resultó que los
tres estaban disponibles y dispuestos a colaborar con Hiatt. Como no podía ser
de otra forma este se puso manos a la obra y llevó a la grabación su mejor
colección de canciones hasta la fecha, cosas como Memphis In The Meantime, Thing Called Love o Have a Little Faith in Me. Pero el momento en el que Cooder brilla
más es en la delicada Lipstick Sunset,
en la que su guitarra da escalofríos de belleza. Para que vean lo que me gusta
este disco, decir que creo que este sería el primer disco (a la par con el 12 Songs de Randy Newman) que
recomendaría a alguien que me preguntara por Cooder, por encima de sus notables
trabajos en solitario. Y es que la combinación es perfecta, las canciones y la
voz de Hiatt, sirven de vehículo perfecto para Cooder que da siempre el toque
perfecto, jugando de manera perfecta con la melodía de Hiatt, sacando de ella
la máxima emoción posible… Aunque a Bonnie
Raitt la que le gustaba era Thing
Called Love de la que decía que la forma de tocar de Cooder era "el sonido más aterrador, oscuro y sexy que
podría imaginarme". La cosa funcionó tan bien que a principios de los
90 los cuatro músicos se volvieron a juntar formando una banda llamada Little Village. Allí sacaría a relucir
a su Coodercaster, una Stratocaster de los 60, fuertemente modificada, con el
cuerpo de una Buddy Holly y el mástil, según se
cuenta, de una Squier japonesa.