Las mejores guitarras para tocar soul
Por Miguel Ángel Ariza
Pocas veces un estilo musical está tan perfectamente
definido con su nombre como ocurre con la música soul, música surgida del alma
de sus creadores y compuesta para llegar a la nuestra.
Si bien es cierto que la voz reina en este estilo por encima
de otras individualidades tampoco mentimos si sostenemos que la guitarra
eléctrica asume un papel más que significativo en haber hecho de este género un
género de masas.
Ya mencionamos algo parecido en su día en el artículo que
dedicamos a las Telecaster más significativas de la historia pero hay
que reincidir en el tema ya que hablar de la guitarra soul es casi lo mismo que
hablar de Steve Cropper, el encargado de poner acordes, riffs y solos en
algunas de las canciones más importantes del género junto a artistas como Otis
Redding, Wilson Picket, Sam and Dave o los propios Booker
T and MG's. Comenzó su carrera echando mano de una Fender Esquire
para pasarse finalmente al mismo modelo con dos pastillas, una Telecaster de
principios de los años 60 con la que definió gran parte del sonido Stax
y por lo tanto del sonido que el soul tomaría como propio y que casi 60 años
después seguimos escuchando.
Pero no solo de Steve Cropper vive el soul y la evolución
del género a sonidos más primitivos, más agresivos y más sexuales, por qué no
decirlo, acercándolo al funk que marcaría la década de los 70 fue llevada a
cabo por artistas cumbres de ese nuevo sonido como Ike Turner y Curtis
Mayfield, ambos ayudados en la mayoría de grabaciones y actuaciones por sus
Fender Stratocaster de la década de los 60. Para Curtis Mayfield ha sido
su elección preferida la mayoría de las ocasiones, aunque también le hemos
podido ver con una Fender Telecaster Thinline y, efectivamente, podemos
ver al 'malo' de Ike con su inseparable Strato en casi cada actuación de la
banda pero ¿quién se va a fijar en él en el escenario teniendo a las Ikettes
moviéndose como huracanes y a esa fiera llamada Tina reclamando todas
las luces? Pues nosotros; los guitarristas. Por eso podemos afirmar que la
Strato también forma parte importante de la historia del sonido del soul.
Por último pero no menos importante hemos dejado a una de
nuestras guitarras preferidas, la Gibson ES-335, una guitarra que ya
hemos alabado anteriormente cuando hablamos de Chuck Berry y su Rock and
Roll pero que, debido a su acabado semihueco, hace de ella una guitarra con la
que nos podemos acercar también a sonido más 'jazzeros' lo que hace de ella una
perfecta compañera de viaje para tocar soul. Esto se evidencia de manera clara
a lo largo de la historia ya que es un modelo muy recurrente que podemos escuchar por ejemplo en los años
70 en las actuaciones más míticas de Stevie Wonder, en manos de Leo
Nocentelli con sus Meters o, sin ir más lejos, en los conciertos
donde una tal Amy Winehouse volvía a poner el soul en el número uno de
las listas mundiales en pleno siglo 21.
Teles, Stratos y 335, o lo que es lo mismo, sonido single
coil o sonido de una semicaja. Con eso ya tienes por donde empezar, ahora solo
falta que le añadas tu alma...