Las 10 Mejores Canciones de Johnny Winter

Por Sergio Ariza

John Dawson Winter III (23 de febrero de 1944 – 16 de julio de 2014), mejor conocido como Johnny Winter, es un importante eslabón en esa cadena del blues rock blanco que va de Cream a Stevie Ray Vaughan, del que es uno de los más claros antecedentes. En sus comienzos fue la gran esperanza blanca (en su caso albina) del blues rock, pero las drogas y la mala salud le impidieron alcanzar las más altas expectativas. Aun así, su carrera está plagada de grandes momentos en los que el tejano se exhibe a las seis cuerdas y con su gran poderío vocal. Éstas son nuestras diez favoritas: 

10. Roll With Me
 

Una canción que Rick Derringer escribió para el disco John Dawson Winter III, publicado en 1974, aunque su versión definitiva aparece en el clásico disco en directo, Johnny Winter Captured Live, grabado en 1975 y publicado un año más tarde. Allí Winter puede lucirse con algunos de los 'licks' más rock de su carrera, con su Gibson Firebird V echando humo, perfectamente acompañado por su segundo de a bordo, el guitarrista Floyd Radford.
  

   

9. Dallas
 

Normalmente se recuerda a Winter por su explosividad y su rapidez con la guitarra eléctrica pero el tejano era también un experto del blues rural acústico como su ídolo Muddy Waters. En esta canción propia de su disco Johnny Winter, demuestra que no necesita echar carreras por el mástil para demostrar su enorme clase. Blues simple y puro en su máxima expresión.
 

   

8. Memory Pain
 

Es imposible no escuchar el inicio de esta canción y pensar en la enorme huella que Cream tuvo en todo el blues rock blanco y en su posterior conversión en el Hard Rock y el Heavy, incluido Winter. El tema fue escrito originalmente por Percy Mayfield y el tejano lo convierte en eso que su bajista de la época, Tommy Shannon (que posteriormente se convertiría en uno de los Double Trouble de Stevie Ray Vaughan), llamó acertadamente "Power Blues". Era la canción que abría Second Winter, un disco que se publicó originalmente como LP de tres caras, ya que la segunda cara del segundo disco estaba vacía.
  

   

7. Johnny B. Goode
 

El primer amor de Winter, por encima del blues, fue el rock & roll y Chuck Berry (que, como diría John Lennon, viene a ser lo mismo). En Second Winter, el segundo de los dos notables discos que sacó en 1969, aparecía esta demoledora versión del mayor clásico de Berry que le permitía explayarse a gusto con la guitarra. Aunque quizás la versión más conocida es la que aparecía cerrando el directo Live Johnny Winter And, publicado en 1971. Fue también la canción con la que cerró su actuación en el mítico festival de Woodstock en la madrugada del 17 al 18 de agosto de 1969.
  

   

6. Be Careful with a Fool
 

Johnny Winter siempre consideró a su disco homónimo de 1969 el mejor que había grabado nunca y no seré yo el que le contradiga. En esta maravillosa versión del Be Careful with a Fool de B.B. King se encuentra posiblemente su mejor actuación a la guitarra jamás grabada en el estudio. No es de extrañar que Winter se sintiera inspirado por King y es que siete años antes, con apenas 17 años, ya había sido capaz de subirse al escenario con el Rey de la guitarra blues, recibiendo su paternal aprobación.
  

   

5. All Tore Down
 

Still Alive and Well
, producido por Rick Derringer, fue el disco que hizo Winter en 1973 tras superar una adicción a la heroína que le había tenido tres años en blanco. El título era explícito pero canciones como este All Tore Down demostraban que el albino todavía lo tenía. Es una de las canciones más rock y sucias de su carrera con la guitarra que definiría su carrera para siempre, su Gibson Firebird V del 63.
  

   

4. It's My Own Fault
(Versión en directo del disco Fillmore East: Al Kooper and Mike Bloomfield - The Lost Concert Tapes 12/13/68)
 

La canción con la que el mundo descubrió a Johnny Winter, el 13 de diciembre de 1968 Mike Bloomfield y Al Kooper daban un concierto en el Fillmore East de Nueva York. Tenían un disco entre los más vendidos, Super Session, y el primero era considerado, con toda razón, el mejor guitarrista blanco de blues de EEUU, pero el guitarrista del Highway 61 Revisited de Bob Dylan siempre estaba dispuesto a descubrir nuevos talentos. Ese día había invitado a subirse al escenario con ellos a un Winter que era totalmente desconocido para el gran público, ni siquiera Kooper había escuchado nada de él, así que imaginen la sorpresa de todo el mundo cuando Bloomfield, que ese día andaba con 40 grados de fiebre, decidió llamarle al escenario para tocar con él este It's My Own Fault de B.B. King, que el tejano había grabado en su primer disco, The Progressive Blues Experiment. Su actuación fue tan memorable que los ejecutivos de Columbia le ficharon con el mayor adelanto de dinero jamás dado a un artista, 600.000 dólares, rompiendo el anterior récord, en concreto el que había logrado un poco antes el guitarrista Jimmy Page cuando firmó con su nuevo grupo, Led Zeppelin, por 200.000 dólares por Atlantic.
  

    

3. Highway 61 Revisited
 

Winter era un experto en hacer versiones pero quizás esta sea la mejor de todas, desde luego era su favorita y la utilizó en sus repertorios en directo durante toda su carrera, muchas veces como último tema de la noche. En el original de Bob Dylan tocaba el tipo que le dio su mayor oportunidad, Mike Bloomfield, pero en esta versión Winter se la lleva a su terreno demostrando que es uno de los más grandes guitarristas de slide de la historia. Posiblemente sea la canción más definitoria de su carrera.  

     

2. Rock And Roll Hoochie Koo
 

En 1970 Winter formó una nueva banda con los restos de los McCoys, un grupo que había tenido un enorme éxito en 1964 con Hang On Sloopy. Allí estaba el guitarrista Rick Derringer que le iba a dar una de sus canciones más emblemáticas, Rock And Roll Hoochie Koo, que aparecería en el destacable Johnny Winter And, publicado ese mismo año. Tres años más tarde Derringer tendría un gran éxito con su relectura de su propia canción pero creo que la versión superior es la de Winter, simple y agresiva, directa y puro rock & roll, con la ajada voz de Winter ajustándosele como un guante. Una verdadera explosión de energía.
  

    

1. I'm Yours & I'm Hers
 

Puede que no exista mayor elogio en el mundo del rock que el que le hicieron los mismísimos Rolling Stones a Winter en 1969. Y es que tras su fichaje por Columbia el tejano sacó al mercado su disco homónimo un 15 de abril de 1969. Pues bien, en menos de tres meses, el 5 de julio de ese mismo año, Sus Satánicas Majestades volverían a subirse a un escenario, por primera vez en más de dos años, en concreto en el Hyde Park londinense, y lo harían, después de que Mick Jagger recitara un poema en honor del recientemente fallecido Brian Jones (que era un gran fan de Winter y de esta canción en particular), con la canción que abría el disco de Winter, la imparable I'm Yours & I'm Hers, con el mejor riff de su carrera, utilizando el slide, que en el caso de Winter era un trozo de cañería. Para ese disco el tejano todavía no usaba su icónica Firebird sino una Fender XII del 66 con seis cuerdas, con la que entregó nuestra canción favorita de su carrera.