Un guitarrista al servicio de la canción

Por Sergio Ariza

Una vez le preguntaron a Mick Ralphs sobre la nota que se pondría, de 1 a 10, a sí mismo como guitarrista, su respuesta revela su modestia pero también su inteligencia: "Menos 20. Nunca pienso en cosas así. Me gusta ser un guitarrista versátil que puede tocar ritmos y pequeñas partes principales. Eso es porque soy un compositor de canciones y escribir canciones se trata de hacer lo que dicta la canción y no de lo que quieres hacer para la canción". Para alguien que ha compuesto canciones tan grandes como Rock & Roll Queen, Ready For Love, One of the Boys, Drivin’ Sister, Can't Get EnoughFeel Like Makin' Loveno puede haber otro estilo que el ponerse al servicio de la CANCIÓN, escrito así con mayúsculas. 

Michael Geoffrey Ralphs 
nació un 31 de marzo de 1944 en Inglaterra. No fue un guitarrista precoz, no cogió una guitarra hasta que un día de 1962 escuchó por la radio el Green Onionsde Booker T and the MGs, las afiladas notas de Steve Cropper le llevaron al instrumento y logró que su tía le comprara una destartalada Rosetti Lucky Seven, su primera guitarra. Con ella daría sus primeros pasos en The Buddies una banda de blues rock con la que llegaría a sacar un single en 1964.
 

Pero no sería hasta 1966 cuando se formaría el corazón de la banda con la que lograría la fama. Ese año apareció The Doc Thomas Group, un grupo que contaba con el propio Ralphs a la guitarra, Stan Tippins (que también venía de los Buddies) a la voz y Pete Overend Watts al bajo. Sus primeros pasos les llevaron a Italia donde terminaron logrando un contrato discográfico y grabando un disco de versiones soul y R&B que se editó en enero de 1967. Para ese momento Ralphs ya se había hecho con una SG y una Telecaster, pero el disco no pasaba de una copia de los Small Faces sin canciones originales (y sin la voz de Steve Marriott). 
 



Las cosas comenzaron a mejorar cuando en 1968 se les unieron el batería Dale ‘Buffin’ Griffin y el teclista Verden Allen. Ralphs seguía mejorando y estaba comenzando a componer sus primeras canciones, utilizando unos Marshall de 50 vatios. No era un guitarrista técnico pero tenía buen oído y sabía que la canción era lo más importante. Tras trasladarse de nuevo al Reino Unido comenzaron a hacerse llamar the Shakedown Sound y, poco después, Silence. Fue bajo ese nombre cuando les descubrió Guy Stevens de Island, el hombre que realizaría dos cambios fundamentales para la formación. El primero fue decidir que Tippins no le valía como cantante. Este dio un paso atrás y se convirtió en el road mánager, mientras la banda puso anuncios con el siguiente texto: “Se busca cantante, debe tener buena imagen y estar hambriento”. Poco después el cantante y pianista Ian Hunter era contratado. Fue en ese momento cuando Stevens propuso su segundo cambio, poner de nombre a la banda Mott The Hoople en homenaje a la novela de Willard Manus.
 

 

En mayo del 69 entraron al estudio de grabación para grabar su primer disco, Stevens tenía claro lo que quería, Bob Dylan al frente de los Rolling Stones, y a eso es a lo que suena ese primer disco. Con Hunter todavía afianzándose Ralphs le dio a la banda su primer gran clásico Rock & Roll Queen, una gran canción que el cantante siempre pensó que había sido la inspiración para el Bitchde los propios Stones. El disco no tuvo una gran repercusión comercial pero la química estaba funcionando a la perfección y la banda estaba haciéndose con una base de fans gracias a sus magníficos conciertos. Ralphs había conseguido que Stevens le comprara una Les Paul Goldtop con dos P-90s por 200 libras y sus Marshall tenían ahora el doble de vatios. En septiembre del 69 compartieron cartel con otro grupo emergente, los Free de Paul Rodgers, no sería la última vez que sus caminos se cruzaran…
 



En 1970, en medio de incontables conciertos (más de 20 al mes) grabaron su segundo disco, Mad Shadows, con Hunter ganando peso como compositor y Ralphs aportando otro par de canciones, entre ellas Thunderbuck Ram, que también canta. No llega al nivel de su debut pero sus directos siguen mejorando y logran su primera gira americana. Allí compartirán escenario con bandas como los Kinks (de los que hacían una versión de You Really Got Me), Ten Years After, TrafficMountain. Una banda que dejará mucha impresión en Ralphs, en especial su guitarrista Leslie West, lo que le llevará a hacerse con una Les Paul Junior que se convertirá en su guitarra principal.
 



Para la grabación de su tercer disco decidieron sustituir a Stevens y producir el disco ellos mismos. Ralphs y Hunter se reparten equitativamente las tareas de composición, con cuatro canciones para cada uno, pero es el guitarrista el que abre las dos caras con las notables Whiskey WomenIt Must Be Love.  En la primera vuelve a poner la voz principal y a demostrar que, sin ser un virtuoso, tiene facilidad para los riffs más efectivos y para decorar a la perfección sus canciones, como ocurre en la acústica Home is Where I Want to Be.
 

Durante la gira de presentación en EEUU, en la primavera del 71, Ralphs perderá una de sus guitarras pero se hará con una de sus favoritas, una Fender Esquire del 57 con la que compondrá una de sus canciones más conocidas, Can’t Get Enough. Ralphs le enseñó la canción a la banda pero Hunter le dijo, amigablemente, que él no era el cantante adecuado. En noviembre de ese año comenzaron una gira por el Reino Unido con Peace, el nuevo proyecto de Paul Rodgers tras la primera ruptura de Free. Ralphs y el cantante conectaron inmediatamente y el guitarrista le enseñó un par de canciones que había escrito, entre ellas Can’t Get Enough. La canción le iba como un guante a la rasposa voz de Rodgers, sobre todo después de que Ralphs cambiara la afinación de su Esquire de Sol a Do. Los dos encontraron mucho en común, con lo que comenzaron a componer cosas juntas. Pero la cosa no pasó a mayores, Ralphs seguía comprometido con Mott y Free se reformó a comienzos del 72.
 

 

Ese fue el año más importante de la carrera de Mott The Hoople. La banda estaba promocionando Brain Capers, su mejor disco hasta la fecha, con canciones como Death May Be Your Santa Claus, un tema tan sucio y salvaje que se puede considerar un antecedente del punk. Su legión de fans, entre los que se encontraba un joven Mick Jones (futuro guitarrista de los Clash), les seguía a todas partes pero no había crecido desde su primer disco. El desánimo se extendía entre una banda que cada vez veía más claro que el éxito parecía evitarles a pesar de su enorme talento. La cosa tocó fondo tras una gira en marzo que terminó en una cochambrosa gasolinera en Suiza. A su vuelta a Inglaterra todo parecía indicar que Mott The Hoople tocaba a su fin. Tanto es así que el bajista se ofreció como posible parte de su banda a David Bowie. Pero resultó que el cantante, en plena escalada a la fama con Ziggy Stardust, era uno de los fans de la banda. Decidido a mantenerles juntos les ofreció una canción que lo cambiaría todo, All The Young Dudes.
 

De repente la banda se vio grabando un disco para una nueva compañía con Bowie como productor. Tras probar Sufragette City y que no funcionara, el autor de Changes les enseñó All The Young Dudes y todos se miraron como si se hubiera vuelto loco, ¡nadie regala una canción tan buena! De repente el ánimo cambió y una banda a punto de la separación se convirtió en una máquina perfecta de rock & roll. Bowie dio con el arreglo final pero fue Ralphs el que salió con la perfecta intro para Dudes, su mejor trabajo hasta la fecha. Para ello utilizó una Gibson Firebird y su estilo al servicio de la canción, encontró una de las mejores de la historia.
 

 

La canción fue más que un éxito, convirtiéndose en el himno oficial del movimiento ‘glam’. De repente esta banda de ‘hard rock’ se vio metida de rebote en el movimiento y comenzaron a vestirse de acuerdo a ello. La purpurina y las botas de plataforma habían hecho su aparición. Unos como Watts lo abrazaron encantados pero Ralphs lo vio como una distracción de la música. El éxito se cobró su precio y Hunter se convirtió en la imagen visible de la banda. Aun así las aportaciones de Ralphs seguían siendo imprescindibles, como la gloriosa Ready For Love, en la que volvía a tomar la voz principal, o su rockera colaboración con Hunter en One Of The Boys.
 

De repente los Hoople eran la nueva sensación, catalogados dentro del 'glam rock'. Pero su cantante no olvidaba los duros tiempos pasados, Mott, su primer disco tras el éxito conseguido con el disco producido por Bowie, veía a una banda hablando de la cara menos glamurosa del rock and roll, la de los perdedores con incontables horas en la carretera ("el circo del rock and roll está en la ciudad"). El disco es un prueba de que Mott The Hoople es una de las grandes bandas de rock de la historia, a pesar de no contar con la fama de otras, y si no escuchen la gloriosa All the Way from Memphis, con un increíble solo de saxofón de Andy McKay de la Roxy Music y otro de Ralphs (el favorito de su carrera) para probarlo.
 

El disco escaló hasta el ‘top ten’ de las listas a su salida en julio del 73 pero también sirvió de epitafio para la primera formación de la banda. Tras grabar ese mismo mes otro de los clásicos de la banda, Roll Away The Stone, Ralphs se marchó para formar Bad Company junto a Rodgers en agosto. La formación la completaban Simon Kirke, también de Free, a la batería y el bajista Boz Burrell, que venía de King Crimson. Fue uno de los más exitosos supergrupos de los 70.
 



Su primer disco se editó en 1974 y demostraba que los riffs de Ralphs y la voz de Rodgers iban como anillo al dedo. Ralphs repescó Ready For Love de su etapa en Mott y puso sobre la mesa otros dos vehículos perfectos para el cantante, Can’t Get EnoughMovin’ On. La simplicidad en el estilo de Ralphs encontraba su mejor foco en la espartana formación de Bad Company, guitarra, bajo, batería y voz. El disco no solo se convirtió en un éxito en su país natal sino que llegó a lo más alto de las listas estadounidenses.
 

Al año siguiente repitieron éxito con el notable Straight Shooter en el que se encontraba la irresistible Feel Like Makin’ Love, compuesta por Ralphs y Rodgers. Pero las cosas empezaron a empeorar con Run with the Pack Burnin' Sky, dos discos que demostraban que se habían estancado y que el saco de grandes canciones se estaba acabando. A pesar de algún buen destello como Rock 'n' Roll Fantasy, el triste Rough Diamonds confirmó que no quedaba ninguna magia y, tras una pelea a puñetazos entre Rodgers y Burrell, la banda se separó.
 

Posteriormente habría nuevas encarnaciones con otros cantantes hasta que en 1998, Rodgers volvió al redil. Desde ese momento ha habido nuevas reuniones que Ralphs ha compaginado con ocasionales reuniones con Mott The Hoople y su propia banda. 

En 2016 Ralphs sufrió un derrame cerebral del que se fue recuperando poco a poco pero que, como confirmó Simon Kirke, le impedirá, casi con seguridad, seguir tocando música en directo. Una pena porque nunca se tiene suficiente de un guitarrista que siempre puso por delante sus gigantescas canciones a su habilidad como guitarrista. Normal si hablamos de alguien que decidió coger una guitarra tras escuchar al guitarrista que mejor ha ejemplificado el ponerse al servicio de la canción y el cantante, Steve Cropper.


Galería de foto