Cerrando la brecha

Por Tom MacIntosh

La banda de metal progresivo Dream Theater acaba de editar su 14º disco de estudio, Distance Over Time, (22 de febrero) y parece claro que va a contentar a los fanáticos con una colección de canciones más corta y reducida, pero el material no es menor en absoluto. A diferencia de su disco anterior, The Astonishing, que era una obra con 34 canciones, en 2 horas y 10 minutos, su nuevo disco es un conjunto elegante de una hora con su particular estilo de arreglos expansivos e intrincadas composiciones.  



La maestría musical es estelar y enfocada, lo que permite al guitarrista principal, John Petrucci, concentrarse en riffs creativos y solos increíbles en canciones como Paralyzed, una obra pegadiza que encaja perfectamente con las piezas progresivas más largas como Fall Into the Light y Pale Blue Dot. El teclista Jordan Rudess brilla y le da a las canciones una textura y una atmósfera en capas, además de su toque de piano en la fabulosa balada Out of Reach.
 

La banda ha pasado varios meses trabajando en el disco, viviendo juntos en su estudio en Monticello, Nueva York, lo que demuestra una dedicación absoluta no solo a la música entre ellos mismos, algo que se puede escuchar en la energía y la calidad de lo que han entregado. También pueden traer números pesados ​​como Room 137, un atronador viaje psicodélico, o deslumbrar con Viper King, que redondea el disco a la perfección.
 



El título, Distance Over Time, puede reflejar cómo han cambiado las cosas desde The Astonishing, expresándose en términos más amplios para una audiencia más universal. Si bien no han reinventado la rueda aquí, organizan un espectáculo diverso, aunque fácil de escuchar y conectar. Está claro que el metal progresivo no sería todavía popular sin Dream Theater. Después de 30 años de producción constante de álbumes, siempre con nuevo material potente, este último esfuerzo podría ser lo mejor que han hecho hasta la fecha.
 

La canción inicial, Untethered Angel, es una joya de rock progresivo, con la increíble voz de James Labrie sobre un duro ritmo por parte del baterista Mike Maglini y el genio del bajo John Myung, con Petrucci tocando su Music Man Majesty Signature de 7 cuerdas pintadas en zafiro siberiano. En Wit's End hay otro número pesado que ofrece poliritmos frenéticos de rango vertiginoso, aullidos a la guitarra y animados solos de teclado. Pale Blue Dot, de hecho, está construida alrededor de la descripción de la Tierra de Carl Sagan, abriéndose en una meseta de ciencia ficción que se mezcla con la pura pesadez de la interacción entre Petrucci y Rudess, con progresiones de tiempo y poder sinfónico. La gran influencia de Deep Purple se muestra en la mencionada Viper King, que parece ser un tributo a Ritchie Blackmore, Jon Lord e Ian Gillan. Luego está el thrash de Barstool Warrior, una ofrenda barroca de agresión metálica. Una canción que podría haberse convertido fácilmente en sencillo es S2N, con su ensoñador estribillo melódico y su estilo lírico que te arrastra como un golpe de dopamina.
 



El lanzamiento número 14 por parte de cualquier otra banda podría sonar agotador y repetitivo, pero Distance Over Time suena fresco y enérgico, lleno de entusiasmo pulido, virtuosismo y excelencia. Esta colección de canciones puede cerrar la brecha entre los fanáticos que adoraban los primeros años y ganarles todo un nuevo ejército de seguidores.

 

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