Las mejores contribuciones de Brian Jones a los Rolling Stones

Por Sergio Ariza

Brian Jones murió hace 51 años, un 3 de julio de 1969, inaugurando el lúgubre ‘club de los 27’ al que en breve se unirían Jimi Hendrix, Janis Joplin y Jim Morrison. Desde Guitars Exchange no queremos dejar de lado esta efeméride para recordar al que, con el permiso de Charlie Watts, es el tercer Stone en importancia tras la dupla formada por Mick Jagger y Keith Richards. Y es que puede que su tiempo en la banda fuera corto, pero estamos hablando de su fundador, primer líder y del hombre que le puso nombre a la banda. Y eso sin hablar de su tremenda aportación como músico, no solo como guitarrista sino como multinstrumentista capaz de colorear una canción con casi cualquier instrumento, dando al grupo algunos de sus sonidos más distintivos, del slide de Little Red Rooster al sitar de Paint It Black. Estos son nuestros diez momentos favoritos de Jones con los Stones 

I Wanna Be Your Man
(Octubre de 1963)
 

Poca gente recuerda que el primer éxito de los Rolling Stones llegó con una canción que les cedieron los Beatles. Tras conocerse, los Stones, que solo habían sacado un sencillo (Come On, una versión de Chuck Berry), les preguntaron a los Beatles si tenían alguna canción, Paul McCartney tenía medio compuesta un tema para que lo cantara Ringo en el siguiente disco llamada I Wanna Be Your Man. John Lennon y él les enseñaron el estribillo a los Stones y estos dijeron, “nos la quedamos”. En ese momento Lennon y McCartney se retiraron a un rincón y en menos de 10 minutos terminaron la canción. No era especialmente genial, el propio Lennon comentaría años más tarde “las únicas dos versiones de la canción eran la de Ringo y la de los Rolling Stones. Eso demuestra claramente la importancia que le dábamos: no íbamos a darles nada grande, ¿verdad?”. Pero los Stones tenían un arma secreta, Brian Jones. La canción era fácil de aprender y se pusieron manos a la obra, entonces Jones se colocó el slide en su mano y comenzó a sacar magia de su Gretsch 6118 Anniversary enchufada a un Vox AC30. De repente la cancioncilla cobraba nueva vida con un toque a uno de los ídolos de Jones, Elmore James. El sencillo, el segundo de la banda, cumplió su objetivo y subió hasta el puesto 12 de las listas británicas, siendo el primer éxito en la historia del rock británico en el que aparece un slide.



I Just Want To Make Love To You
(Febrero 1964)
 

A principios de 1964 los Rolling Stones grabaron su primer disco de larga duración, llamado simplemente The Rolling Stones. En ese disco Jones ya comienza a demostrar su versatilidad como músico, y es que, además, de tocar la guitarra, también toca la armónica y la percusión en varias canciones. En particular con la armónica Brian demuestra una maestría inusual en un chico blanco inglés, algo que, con los años, también conseguirá Mick Jagger. Pero en estos primeros tiempos es Brian Jones el principal encargado de tocar la armónica, como en este I Just Want To Make Love To You, una canción que Willie Dixon escribió para Muddy Waters, en la que recrea la magia de la versión original con Little Walter como modelo. Otros ejemplos destacados de su labor con el instrumento se pueden escuchar en Not Fade Away, Goin' Home, High And Dry o Who's been sleeping here?
 

 

Little Red Rooster
(Septiembre de 1964)
 

Se podría considerar Little Red Rooster como la gran canción de Brian Jones en los Rolling Stones. Jones era el más purista del blues de todos en la banda, la había llamado como una canción de Muddy Waters y él mismo se hacía llamar Elmo Lewis antes de formar el grupo por su amor por Elmore James. Así que cuando tras conseguir el primer número uno de la banda en junio del 64, con It’s All Over Now, consiguió que se eligiera como continuación esta versión de otro tema de Willie Dixon, esta vez para Howlin' Wolf, lo vio como un triunfo personal. No en vano su trabajo con el slide era la pieza fundamental de la canción. Lo grabó con una Fender Telecaster nueva que se acababa de comprar Keith Richards, con afinación normal, mientras que el propio Keith utiliza una acústica Framus Jumbo. Pero cuando tocó la canción en el Show de Ed Sullivan lo hizo con una Epiphone Casino, mientras que en otras ocasiones utilizó su mítica Vox Teardrop. Para rematar también es responsable de la parte a la armónica. Tras convertirse en el segundo número uno consecutivo de la banda, no hubo un solo guitarrista en Reino Unido que no comenzara a tontear con el slide. Otros ejemplos de Jones con el slide: I’m a King bee, Can't Be Satisfied, Doncha Bother Me o la increíble canción que cierra este listado.

 

The Last Time
(Enero de 1965)
 

The Last Time
fue el primer sencillo de la banda firmado por Jagger y Richards, así que, en cierto modo, supone algo así como el fin del reinado de Brian Jones en los Rolling Stones. A pesar de que nunca estuvo a gusto con las composiciones de sus compañeros (es conocida la anécdota de como solía tocar parte de Popeye el Marino mientras el resto de la banda tocaba Satisfaction en directo) siguió aportando grandes cosas. En esta ocasión es el encargado de tocar, posiblemente de componer, el riff principal con su Vox Teardrop y su Vox AC30, mientras que Keith se queda a cargo del solo con su Les Paul del 59.
 

 

Under My Thumb
(Marzo de 1966)
 

A pesar de ser el primer disco de la banda compuesto en su totalidad por el tándem Jagger-Richards, Aftermath tiene otro protagonista, un Brian Jones que ejerce de mago multinstrumentrista, además de ser feliz siendo el centro de todas las miradas en EEUU, dónde la banda ha cosechado un tremendo éxito. En Under My Thumb vuelve a sobresalir con el riff principal, tocado con la marimba, dándole una sonoridad totalmente especial a esta gran canción.

 

Paint It Black
(Marzo de 1966)
 

A pesar de que la banda se había apartado de su querido blues y su liderazgo hubiera quedado atrás, puede que las aportaciones de Jones a la etapa media de los Stones sean las más importantes. Para esta época había perdido bastante interés en tocar la guitarra, pero con su extraordinaria facilidad para tocar y aprender otros instrumentos le dio a la banda una diversidad que nunca volverían a tener. Como apuntaba el propio Keith Richards: "Brian todavía era fantástico a la hora de grabar discos, porque era un músico muy versátil (...) Era un músico increíblemente inventivo". Puede que su mayor aportación la hiciera en Paint It Black, una de las canciones más icónicas de la banda cuyo elemento distintivo es el sitar tocado por Brian Jones. Un instrumento que, al igual que con el slide, pudo dominar al poco tiempo de empezar a tocarlo.
 

 

Lady Jane
(Marzo de 1966)
 

Otro ejemplo de su increíble aportación en Aftermath es este Lady Jane, una balada de folk británico a la que Jones añadió el Dulcimer, un instrumento de cuerda de la familia de la cítara, que le da su sonido más especial. Jones había descubierto el instrumento a través del músico folk Richard Fariña un poco antes de la grabación del disco, volviendo a demostrar su increíble habilidad a la hora de aprender a tocar nuevos instrumentos. También se le puede escuchar tocándolo en la delicada I Am Waiting.
 

 

Ruby Tuesday
(Noviembre de 1966)
 

Con el gusto por todo tipo de instrumentación de la psicodelia, Jones vio ampliado su campo de acción, como bien demuestra su trabajo en Ruby Tuesday, una maravillosa canción de Keith que, en palabras de Marianne Faithfull, surgió de una melodía original de Jones. En la letra Keith habla de una chica de espíritu libre, en concreto de su novia de aquel entonces, Linda Keith. Musicalmente es Jones el que destaca tocando la flauta dulce y parte del piano (aunque el principal lo grabó Jack Nitzsche), los elementos más distintivos de la misma.

 

2000 Light Years From Home
(Entre julio y septiembre de 1967)
 

Los Stones también quedaron atrapados por el hechizo de Sgt. Pepper's e hicieron su particular réplica, Their Satanic Majesties Request. Pero a los chicos malos del rock abandonar los escenarios y sumergirse en el estudio no les sentó igual de bien que a los de Liverpool. El disco resultante no se encuentra entre los mejores de su carrera pero tiene varias canciones más que interesantes como She's A Rainbow, Citadel o este 2000 Light Years From Home, la única que han tocado regularmente en directo, en la que Brian Jones vuelve a ejercer de protagonista tocando con el melotrón la parte que parece una sección de cuerdas, además del theremin y otros efectos sonoros.
 

 

No Expectations
(entre marzo y junio de 1968)
 

El inicio del fin para Jones llegó a finales de 1967, cuando tras una enfermedad que le retuvo en Marruecos, Anita Pallenberg, su novia, se fue con un Keith Richards enamorado de ella que no soportaba los malos tratos de Brian a la modelo. Su deterioro debido a las drogas también era notorio y su rostro se encontraba hinchado. Alejado de sus compañeros su implicación en los últimos tiempos dejaba mucho que desear. Durante la grabación de Beggar´s Banquet se ausentaba de muchas de las sesiones de grabación y cuando se presentaba tampoco parecía estar muy interesado, a pesar de ser una vuelta a las raíces y a su adorado blues. Fue en ese disco donde realizó su última contribución importante a la banda tocando el increíble slide acústico de No Expectations, sobre los acordes de Keith en su Gibson Hummingbird, posiblemente su mejor trabajo a las seis cuerdas, un recordatorio de adonde podría haber llegado como guitarrista si le hubiera seguido prestando más atención al instrumento.