El tiempo no espera a nadie

Por Paul Rigg

Tras Walls, de 2016, el octavo disco de Kings of Leon, When You See Yourself, (5 de marzo de 2021; RCA records) es una oferta optimista llena de melodías pegadizas y estimulantes basadas en la guitarra de los hermanos Caleb, Nathan y Jared, y el primo Matthew Followill. El productor Markus Dravs (Coldplay, Arcade Fire, Mumford & Sons) vuelve a encargarse de que el producto final sea coherente y pulido.    

     

El sencillo principal, Bandit, publicado en enero de 2021, es uno de los temas más destacados, con sus riffs de guitarra y sus letras de aventuras de tíos que evocan con fuerza los días pasados de la banda. El sonido es distorsionado, con el guitarrista principal Matthew tocando lo que parece su genial Epiphone Wilshire, al menos en la versión en directo del Late Show.
   

El álbum se abre, sin embargo, con When You See Yourself, Are You Far Away, que presenta unos preciosos acordes rotos y una letra que predica la reflexión tranquila, una filosofía por la que la banda no siempre ha sido conocida: "Los placeres de esta vida, me dicen, te escupirán en medio del camino", entona Caleb.
    

     

El siguiente tema es la canción de amor 100.000 People, pero es mejor la línea de bajo funky de Stormy Weather, que está llena de soul. Golden Restless Age, por su parte, cuenta con guitarras cortantes y una letra que se regodea en la nostalgia: "Sólo pasas por una forma de ti, te miro a los ojos y hay rabia", canta Caleb.
   

Supermarket
comienza con un precioso ritmo de bajo antes de que entren suavemente las guitarras y la voz. La letra gira en torno a las cosas que hacemos para salir adelante cuando la vida se pone difícil y habla de "el largo y duro camino" en el que nos encontramos: "No voy a ninguna parte, si tienes tiempo".
     

      

La canción Claire and Eddie, de corte country, representa un cambio de ritmo y de tema en el disco, ya que aborda el cambio climático. La letra "Fire's gonna rage if people don't change" se alterna con un guiño a una relación romántica no especificada, y supone un cambio refrescante.  
   

La penúltima canción, Echoing, es un inofensivo tema de rock de medio pelo, mientras que el álbum se cierra con la melancólica, introspectiva y ligeramente sentimental Fairytale.
   

En parte, Kings of Leon se convirtió en un gran grupo de estadios gracias a un puñado de temas llenos de bravuconería masculina, pero los años han pasado y ahora se mueven en una dirección que parece completamente diferente. "Sabemos que a mucha gente le gustaría que saliéramos con pelo largo y bigote, que volviéramos a ser los chicos de 'Youth & Young Manhood', pero ahora somos una banda diferente", dijo Caleb recientemente. Eso decepcionará inevitablemente a algunos fans, pero como dice el viejo refrán, 'el tiempo y la marea no esperan a nadie'.
   

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