En busca de sí mismos
Por Sergio Ariza
Atom Heart Mother está lejos de ser un disco perfecto pero no deja de ser un fascinante error, uno que ve a una banda gigantesca todavía en busca de sí misma, todavía tratando de salir de la enorme sombra de su líder original, Syd Barrett. Un disco de prueba y error en el que ensayan muchas cosas y no todas les salen bien, una búsqueda muy interesante en la que ya se pueden ver muchas de las cosas que les harán grandes y que encontrarán definitivamente en el siguiente disco, Meddle.
Ni Roger Waters, ni David Gilmour, guardan mucho cariño por el disco, claramente todavía parte de un periodo de transición, pero Atom Heart Mother tiene momentos realmente brillantes y hasta cuando fracasa, como en la pieza titular, lo hace de manera muy interesante. Y es que la primera cara del disco, de 23 minutos y 44 segundos de duración, está ocupada al completo por Atom Heart Mother, una larguísima canción instrumental grabada entre los cuatro pero a la que consideraban que faltaba algo. Ese algo lo puso el compositor Ron Geesin que realizó un arreglo orquestal que fue puesto en primera plana por la banda, algo contrario a lo que se solía hacer en la música pop y rock. Pero, al contrario, que otras épicas canciones posteriores como Echoes o Shine On You Crazy Diamond, Atom Heart Mother no era una pieza redonda sino que naufragaba en varias de sus secciones, mientras que en otras resplandecía brillantemente.
En la cara B volvían a apostar, como en Ummagumma, por dar espacio a cada uno de los miembros con sus composiciones. Esta parte se abre con If, una melancólica canción acústica de Roger Waters en la que se nota todavía mucho la alargada sombra de Barrett, tanto en la letra ("if i go insane will you still let me join in with the game?") como en la música, claramente inspirada por el antiguo miembro, como si Waters hubiera utilizado las sesiones que compartía con Gilmour grabando el primer disco en solitario de Syd para pedirle alguna canción para la banda. Summer '68 es la más pegadiza del lote, compuesta y cantada por Rick Wright, también se nota la influencia del compositor de See Emily Play en ella, además de la de los Beatles, con un solo de trompeta a lo Penny Lane.
La mejor del lote es Fat Old Sun, una de las canciones más subestimadas de la historia de la banda inglesa. Una canción con un sonido pastoral en la que destaca la utilización de un 'pedal steel' y una de las interpretaciones vocales más bellas de Gilmour. Para la melodía, y parte de la letra, puede que se basara en el Lazy Old Sun de los Kinks pero lo mejor llegaba con el solo final, en una de las primeras apariciones de la Black Strat, un solo melódico y altamente coreable que probaba a Gilmour como uno de los mejores guitarristas del mundo. El disco terminaba con Alan's Psychedelic Breakfast, un collage de sonidos sin mucho interés.
Pero, a pesar de sus fallos, Atom Heart Mother no deja de ser un disco muy interesante, sobre todo sabiendo a donde se dirige la banda, es una fascinante búsqueda de sonidos de un grupo que estaba a punto de hallarse a sí mismo definitivamente.