Un Sex Pistol en busca de sus guitarras perdidas
Por Paul Rigg
La leyenda
del punk, bajista de los Sex Pistols
y compositor, Glen Matlock, no ha
parado desde que apareciera en el incendiario programa de Bill Grundy, ‘Today’, en diciembre de 1976. Fue esa infame entrevista
la que propulsó el punk en el ‘mainstream’ y la que terminó definitivamente con
la carrera de Grundy.
Aparte de
diversas reuniones de los Pistols, Matlock, originario de Paddington, ha
trabajado desde entonces con Iggy Pop,
Primal Scream, The Damned o los Faces,
además de liderar su propia banda, The
Philistines, y variadas cosas más.
En diciembre
de 2016 Matlock ofreció una cuantiosa recompensa en su página de Facebook por
la devolución de tres queridos instrumentos que le habían robado. Guitars Exchange se reúne con un relajado, amigable y tranquilo Matlock para preguntarle por la
respuesta a su iniciativa, su visión actual de la música y su amor por las
guitarras.
GUITARS EXCHANGE: ¿Qué respuesta has encontrado entre la comunidad
guitarrera a tu petición de información sobre tus bajos robados, un Ivory
Fender Precission y un Modern Mexican Black Precission con el protector
cambiado, además de tu acústica D-37 Modern Guild?
GLEN MATLOCK: Tuve más de
1.000 me gusta y fue compartido por mucha gente en Facebook, lo que me agradó
enormemente. Pero por ahora no tengo ni una pista.
Dos de los
instrumentos los robaron de mi coche, a la puerta de mi casa, tras un bolo. El
otro lo robaron de mi casa un año antes, pero como mis dos hijos también tocan
y tenemos muchos instrumentos en casa no nos dimos cuenta hasta que pasó un
tiempo. Por eso puse el mensaje sobre los tres al mismo tiempo.
G.E.: ¿Qué significaban esos instrumentos para ti?
G.M.: El bajo
blanco Ivory Fender Precission del 61 era especialmente importante para mí
porque lo toqué con los Sex Pistols e Iggy Pop. Además, como he dicho, tengo
dos hijos que tocan en bandas así que ese bajo era como una herencia familiar.
Era un bajo precioso.
Lo compré en
1979 en Wunjo, una tienda en Charing Cross, cuando estaba tocando con Iggy.
¡Casi no me lo compro porque me dijeron que había pertenecido a uno de los Tremeloes! Pagué por él unas 250 o 350
libras, creo recordar, lo que era un montón en la época.
Probablemente
alguien lo habrá pintado de negro y lo habrá vendido por 50 libras, algo de
speed o similar (lo que sea que la gente se meta en estos tiempos) sin darse
cuenta de lo que vale.
El clavijero
estaba ligeramente inclinado y tenía unas pocas marcas en los bordes. Era
único, si lo volviera a ver lo reconocería al instante.
El bajo
Modern Mexican Black Precission lo usé en la reunión de los Sex Pistols de
2007/2008.
Por último la
D-37 Blonde Guild acústica tenía una pastilla entallada en fábrica
G.E.: Eres el coautor de 10 de las 12 canciones del
‘Never mind the bollocks’; entre ellas ‘Anarchy in the UK’, ‘God sabe the
Queen’ o ‘Pretty Vacant’; ¿utilizaste alguno de estos instrumentos en esa
época?
G.M.: Toqué un
Rickenbacker para esas canciones. Ese bajo está expuesto actualmente en el
Museo British Music Experience de Liverpool.
G.E.: ¿Quién es el guitarrista de tu disco favorito?
G.M.: Tendría que
decir Syd Barrett en ‘The piper at the gates of dawn’. Creo
que era un guitarrista magnífico. No sé cómo nadie puede estar tan ido y ser
capaz de tocar así.
G.E.: Alguna vez has mencionado que alguno de tus
bajistas favoritos son James Jamerson (un músico de sesión de Motown), Klaus
Voorman (Manfred Mann) y Ronnie Lane (Small Faces). ¿Hay alguno nuevo que te
guste?
G.M.: No
especialmente. En el pasado la gente tocaba en directo y tenían personalidad y
musicalidad, pero ahora todos los errores son subsanados así que no es lo
mismo.
Por eso
disfruté tanto tocando con los Faces. De pequeño me ponía frente al espejo
haciendo como si fuera uno de ellos y, posteriormente, pude tocar a su lado
delante de 50.000 personas en Japón. Eso fue realmente divertido.
Entre los
guitarristas actuales me gustaría mencionar a Matt Bellamy de Muse.
Tiene una guitarra extrañísima que se ilumina. Una vez hablé con él sobre su
padre, George Bellamy, que tocaba la
guitarra rítmica para un grupo pop de los 60 llamado The Tornados y le encantó que le conociera.
También me
gusta mucho el sonido de las guitarras de la banda Ringo Deathstarr. Toqué una vez con ellos en Canadá y, además de
tener un nombre genial, son realmente buenos en directo.
G.E: Dejando a un lado ‘Never mind the bollocks’ ¿cuál
es en tu opinión el mejor disco punk?
G.M.: ‘Blank generation’ de Richard Hell and The Voidoids. Me
encanta la guitarra de Richard Quine
en ése. Creo además que es la canción punk más importante de todos los tiempos.
G.E.: ¿Mantienes algún tipo de relación con John Lydon?
¿Hay alguna oportunidad de una nueva reunión de los Sex Pistols?
G.M.: John y yo no
tenemos ningún tipo de contacto, lo cual creo que nos hace igualmente felices.
Cada vez que hemos tenido una reunión siempre ha sido una cosa hecha en el
último minuto, así que nunca se puede decir no rotundamente a la posibilidad.
Recientemente ha dicho algo que me ha gustado, “no somos los mejores amigos del mundo pero desde luego no somos los
peores enemigos”, no puedo estar más de acuerdo con ello.
Al final los
cuatro compartimos un momento único en la historia. Estoy muy satisfecho de
haber vivido esa experiencia y tener eso en común con ellos.
Nuestra
entrevista termina con Matlock ofreciéndose a enviar algunas fotos de sus
queridos instrumentos. No es descabellado decir que sus canciones cambiaron
vidas, porque los Sex Pistols ayudaron a mucha gente joven a soñar en grande.
¿Sería demasiado esperar que ahora alguien pudiera devolverle sus guitarras?
(Imagen bajo Rickenbacker: Courtesy of British Music Experience Museum;
Otras imágenes: Courtesy of Yellow Brick Music;
Resto: ©CordonPress)