Al estilo de Mike Bloomfield
Por Miguel Ángel Ariza
Como en la
leyenda de Arturo que envía a sus caballeros en búsqueda del cáliz de Cristo,
el señor Mike Bloomfield también
envió a todos sus amigos en búsqueda de la guitarra que ansiaba, que consiguió
y que finalmente convirtió en nuestro tantas veces citado santo grial
particular: la Gibson Les Paul Standard de 1959.
Puede que
Mike Bloomfield no tenga la fama de Clapton, Gibbons o Page pero
muchos de los más importantes vendedores de guitarras nuevas y vintage de
Estados Unidos que llevan en el negocio desde los 60 lo tienen bien claro: Mike
Bloomfield es el responsable directo de la revaloracización de lo vintage en
Estados Unidos primero y el resto del mundo después. ¿Por qué? Pues porque puso
todo el empeño del mundo en encontrar la guitarra que le había volado la cabeza
de joven, esa que Clapton usase en el mítico disco junto a John Mayall;
una guitarra que Gibson había cesado de producir debido a sus pocas ventas y
que tras ser adquirida por Bloomfield comenzó a ser la guitarra más buscada en
cada estudio de grabación ya que todo el mundo quería el sonido que el
guitarrista de la por entonces recién formada banda The Electric Flag conseguía.
Como
decíamos Mike Bloomfield no gozaba quizá del éxito popular de otros artistas de
la época pero sí que gozaba de la admiración absoluta dentro del gremio de
guitarristas, lo que provocó que una vez que él comenzó a usar la Les Paul del
59, muchos de sus coetáneos empezaron a buscar Les Pauls con las que emular el
sonido del guitarrista que tanto admiraban y dieron comienzo a una burbuja de
lo vintage que no ha dejado de crecer hasta hoy en día y cuyo mejor ejemplo es
este modelo del que hablamos por el que se pagan hoy en día cifras en torno a
los 400.000 dólares por una en buen estado.
Pero
aunque estamos hablando de uno de los buques insignia de la Les Paul del 59 la
carrera de Mike Bloomfield comienza de la mano de otro auténtico clásico de
nuestro mundo: la Fender Telecaster, la primera guitarra de calidad
que compró en su vida y con la que podemos verle en fotografías y esucharle en
grabaciones de mediados de los 60 con la Paul Butterfield Blues Band (mientras
seguía buscando una Les Paul del 59, modelo que, por cierto, podía tocar con
regularidad ya que su buen amigo John Sebastian de los Loving
Spoonful tenía una y se la prestaba con frecuencia pero no acababa por
vendérsela).
Finalmente
consiguió convencer a un antiguo fan suyo de que le vendiese la 59 sunburst que
había conseguido a cambio de su Gibson Les Paul Goldtop y algo
de dinero extra y el resto es la historia de amor entre este modelo y este
pedazo de guitarrista que más o menos os hemos resumido aquí. La estrenó en
directo el mismo día que estrenó su banda, The Electric Flag, en un evento
llamado Monterrey Pop Festival, el auténtico kilómetro 0 de los
grandes eventos de rock de la historia y que cambió la manera de afrontar la
música en directo para el resto de los días. Dos años antes Bloomfield también
estaba al lado de Bob Dylan en el Newport Folk
Festival en el que la cultura norteamericana dio un giro radical al
ver al hombre que se erigía como la voz de toda una generación abrazar el rock
principalmente liderado por la guitarra salvaje de Mike Bloomfield, un guitarrista
cuya mezcla de técnica y visceralidad hacen de él uno de los más grandes
guitarristas de blues y soul de todos los tiempos y que quizá sea mucho más
importante en la historia de la música de lo que creemos...