Slash y su 'sweet spot'
por Gorkez
A Slash le hemos oído hablar de su "sweet spot": ese lugar en el
escenario, ese punto concreto donde sucede la magia, donde halla el equilibrio
perfecto entre la banda y su guitarra.
Donde
Les Paul y Marshall se hablan, se quieren y cantan para erizarte los pelos de
la nuca. Donde atacas una nota y aparece un arcoíris de armónicos, equilibrio
perfecto empaquetado en un feedback
perfecto, sustain y blues infinitos.
En
ese sweet spot también surge el caos,
la destrucción. Riffs con una mala leche increíble y power chords que son un puñetazo en la cara.
Slash
es blues y rock clásico adulterados, muy adulterados, con la mala baba y
actitud anárquica del punk.
En
parte primario, punk, acordes, potencia. En parte virtuoso, maestro de riffs
irrepetibles. En parte bluesman, alma que canta.
Con
un común denominador: la unión entre Les Paul y Marshall.
Todo
leyenda.