El imperecedero amor por el blues

Por Tom MacIntosh

El lanzamiento de Blues, una colección de tres discos de material de Rory Gallagher, lanzado el 31 de mayo de 2019, es un regalo especial para los fans del legendario estilo del irlandés y su compromiso con el dominio de su instrumento y el blues. Viene en 3 partes deliciosas, actuaciones acústicas, eléctricas y en vivo, un tesoro de grabaciones raras e inéditas, remakes de canciones famosas de Gallagher, y citas con grandes invitados de la guitarra. Los 3 discos no están en orden cronológico, sino más bien construidos alrededor de su evolución como músico, compositor y su amor por el blues.  

Así que aquí en Guitars Exchange echaremos un vistazo a los tres discos, empezando por:
 

Electric Blues
 

Esta joya se abre con un paseo salvaje a través del Don't Start Me Talkin' de Sonny Boy Williamson, grabada durante las sesiones de 1982 de Jinx, donde Gallagher no tiene límites en su brillante slide y sus riffs de armónica aullando, rodeado de un poco de piano de blues de Chicago y una sección rítmica cruda, un gran inicio para saciar la sed de más de un adicto al blues. Luego está A Million Miles Away, una versión inédita de las sesiones de la BBC 1 en 1973, con una introducción diferente de las otras versiones. Su voz aquí se mezcla dulcemente con su trabajo con los dedos en su Strat, ofreciendo otro momento dorado de la pasión del hombre por el enfoque del blues crudo. Más adelante escucharemos las versiones espartanas de As The Crow Flies de Tony Joe White, I'm Ready, grabada con Muddy Waters en 1971, y Drop Down Baby, con el mago del skiffle (un híbrido de jazz que mezcla blues y folk) Lonnie Donegan, grabado en 1978, que te hará servirte un whisky con hielo (naturalmente) y ponerte a escuchar religiosamente el blues.

Esta colección de blues eléctrico de Rory Gallagher es el complemento perfecto para el primo acústico que le sigue...  

   

  

Acoustic Blues
 

Este disco está compuesto por los descartes de los discos Tattoo y Deuce que muestran el considerable toque de Gallagher con el slide en la acústica como en Who's That Coming, tocando blues con un resonador acústico que es puro Gallagher desplegando su magia, que es de lo que trata esta colección. Luego viene el Secret Agent, con un riff que es sin duda el nieto del riff de apertura de La Grange de ZZ Top; admiradores, sin duda, del inmortal Rory Gallagher. Otros estilos de blues acústico aparecen en Should Have Have Learned My Lesson de las sesiones de Deuce de 1971, Want Ad Blues (Wanted Blues) de John Lee Hooker grabada en 1988, Prison Blues, y Banker's Blues de Big Bill Broonzy.
 

   

  

Live Blues
   

A diferencia de las recetas de estudio, el directo siempre trae algunos platos deliciosos. Las primeras tres entradas en el menú son When My Baby Left Me, otra versión de Williamson, Nothing But the Devil de Jerry West, y What in the World de Willie Dixon son platos principales al rojo vivo. Las apariciones como invitado de Albert King en You Upset Me (1995), el gran Jack Bruce echando una mano en Born Under a Bad Sign, y el toque del trombonista gurú Chris Barber en Comin' Home Baby son para los coleccionistas de blues/rock.
 

   

  

La mayoría de los discos recopilatorios son para las masas, una colección de 'grandes éxitos' y una compra barata, pero este se destaca porque el 90% del material era inédito hasta ahora. Es una sabrosa rareza en el mundo de uno de los bluesmen más admirables del mundo. El encanto de este escritor también está en el hecho de que estas canciones suyas, casi 25 años después de su temprana muerte, suenan frescas y nuevas, como si estuviera tocando a la vuelta de la esquina... absolutamente puro Rory Gallagher.  

Está en su casa, quizás posea la llave de un lugar donde los más grandes guitarristas de la historia han vivido, como los Hendrix, Page, Clapton, Beck, Richards, y ha tenido una inmensa influencia en gente como Steve Vai, Joe Satriani, Brian "Le debo a Rory Gallagher mi sonido" May, por mencionar sólo algunos de los dioses del rock que ha influido.
 

Este es un disco imprescindible para cualquier bluesman o blueswoman principiante, y sin duda emocionará al inteligente grupo de adictos a Gallagher y al blues de todo el mundo.

   


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