Al estilo de Robbie Robertson
Por Miguel Ángel Ariza
Muy pocos guitarristas han sido capaces de
pasar a la historia tanto por su trabajo propio al frente de una banda como por
su labor de guitarrista de estudio o de gira para otros artistas. Hoy nos
topamos con uno de los ejemplos más claros de esta raza de músicos, el señor Robbie Robertson, que se
merecería un lugar en nuestro olimpo tan solo como acompañante en la mejor
época en la carrera de Bob Dylan, y
eso es mucho decir, pero que además añade a eso su propia trayectoria junto a The Band, una de las bandas más
importantes de finales de los sesenta y los años setenta en Estados Unidos y
banda creadora de ese sonido que tanto nos gusta y que se etiquetó en su día
como 'americana'.
Además, y es de agradecer, pocas veces a lo
largo de todas las semanas en las que nos hemos ido metiendo en el equipo de
alguno de nuestros héroes en esta sección de "Al estilo de" lo hemos tenido tan fácil a la hora de recabar
información como con nuestro protagonista de hoy en cuya página podemos ver
detalladamente y con fotografías la mayoría de guitarras, amplificadores y
pedales que ha usado a lo largo de su dilatadísima carrera y que usa en la
actualidad.
Así podemos comenzar hablando de su Martin D28
de 1951 con la que grabó la que quizá sea su canción más representativa The Weight, y que por cierto no es la
única D28 que tiene ya que añade a su colección otra de 1971. Por supuesto no es el único modelo de esta
marca y ni mucho menos el más antiguo ya que tiene en su poder una 000 45 de 1928,
una 0042 de 1901 o una 0045 de 1919, modelo del que por cierto tiene una serie
‘signature’ con esta marca americana.
Pero, como todos sabéis, no solo de guitarras
acústicas vive este artista sino que precisamente fue su sonido eléctrico y
rockero el que hizo que recibiese pitada tras pitada en sus primeros conciertos
con Bob Dylan cuando mucho folkie aún no se había percatado de que los tiempos
estaban cambiando. De hecho una de las guitarras que forman su colección es la
Fender Telecaster de 1965 que el propio Dylan usó en la gira 'Going electric' y
que luego Robertson usó en directo y estudio en innumerables ocasiones. Al
sonido Fender característico del guitarrista de The Band también hay que añadir
tonos como el de su Gibson Es-335 o su Danelectro de 1959 pero si hay un modelo
de guitarra al que podemos ligar a este guitarrista es a la Fender
Stratocaster, eso sí, muy modificada siempre con respecto al modelo original.
Así llegamos a su modelo más mítico, su Stratocaster de 1954 sin pastilla de medios,
y con un humbucker en la posición de puente además de tener sustituidos los
potenciómetros originales por los de una Telecaster.
En cuanto a sus amplificadores es evidente
también su querencia por la marca Fender, siendo los modelos como el Harvard, el
Twin o el Fender Champ sus escogidos.
Y para sacar rendimiento de esos
amplificadores son muchos los pedales de la marca Lovetone que usa pero también
hay mucho clásico en su pedalera como por ejemplo el Fat Boost o el Supra Trem
de Fulltone, el Ibanez Tubescreamer aunque también pedales menos comunes como
el Electro Harmonix Freeze o uno de los mejores wahs que hemos probado nunca:
el Buddah Wah.
Éste es un breve resumen del equipo de Robbie
Robertson, un guitarrista que por sí solo hubiese sido grande pero que tuvo la
suerte de convertirse en el guitarrista de Bob Dylan lo que acabó por
convertirle en una leyenda de una dimensión mucho mayor y que como resaltábamos
al principio además nos deja en su web un repaso detallado de todo su equipo
cosa que en una sección como ésta agradecemos de veras.